Caballero, tras archivarse su causa como investigado en la operación Patos: «Respeto a la Justicia»

e. v. pita VIGO / LA VOZ

GALICIA

M.MORALEJO

El primer edil fue investigado durante más de un año porque su nombre apareció en la lista de un constructor de la empresa Eiriña que, supuestamente, hacía regalos a políticos de Vigo

16 sep 2017 . Actualizado a las 23:42 h.

El alcalde de Vigo, Abel Caballero, hizo este viernes su primera declaración después de que la jueza de la operación Patos archivase la causa contra él como investigado en una trama de tráfico de influencias. Caballero se limitó a decir: «Yo respeto muchísimo las acciones de la Justicia».

El primer edil fue investigado durante más de un año porque su nombre apareció en la lista de un constructor de la empresa Eiriña, Enrique Alonso Pais, que, supuestamente, hacía regalos a políticos locales de Vigo y provinciales como pago de favores o adjudicaciones de obras en concursos públicos. El empresario tenía anotado en su ordenador el envío al alcalde de Vigo de una pluma estilográfica y un reloj que el mandatario negó haberse quedado, y recalcó que los devolvió a la tienda.

Otra media decena de políticos de Vigo y su área fueron excluidos también de la investigación salvo el expresidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán. La jueza lo implica en un caso de prevaricación y alteración de precios en las obras de un campo de fútbol de la zona de las Rías Baixas.

El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, insistió en la presunción de inocencia de Louzán tras conocerse que sigue dentro de la causa judicial. Rueda señaló que la Justicia tiene que actuar y le deseó a Louzán la misma suerte que a Caballero y sus tres concejales (David Regades, Ángel Rivas e Isaura Abelairas), así como el expresidente del PP local José Manuel Figueroa y la exdelegada de la Xunta María José Bravo Bosch. De los 51 investigados inicialmente solo siguen estándolo 13.

La jueza también divide la operación Patos en cinco piezas separadas, una de ellas dedicada en exclusiva a la Diputación de Pontevedra, en la que también figuran un jefe técnico, dos empresarios y el cerebro de la trama. Al ser piezas separadas, estas continuarán de forma independiente sin que un retraso en un caso altere al resto. Las partes están pidiendo nuevas declaraciones de testigos y más pruebas.

Fuentes cercanas al caso dicen que la operación Patos se desinfló porque faltaron documentos clave que luego entregaron las defensas a la jueza y que sirvieron para aclarar todas las lagunas. Ante tales pruebas, el fiscal retiró los cargos.