Feijoo abre la puerta a un cambio de opinión sobre su futuro en Galicia

Juan María Capeáns Garrido
Juan Capeáns SANTIAGO

GALICIA

Xoán A. Soler

«Daré mi opinión a lo largo del plazo que marque la junta directiva del PP», dijo

08 jun 2018 . Actualizado a las 17:26 h.

Da igual que le pregunten del derecho o del revés. Si para algo se ha entrenado Alberto Núñez Feijoo con perseverancia en la última década es para esquivar las cuestiones que tienen que ver con decisiones que dependen exclusivamente de él: las crisis de gobierno, las fechas de las elecciones autonómicas y, prácticamente desde que llegó a la Xunta, sobre su futuro político fuera de Galicia. Ayer, tras la reunión semanal de su Ejecutivo, puso en práctica su destreza y trató de zanjar -sin éxito- el brete mediático, que ya esperaba a bocajarro: «O congreso do Partido Popular non está convocado. Cando se convoque, todos os afiliados teñen que dar a súa opinión, eu tamén, e tomarei a miña decisión. Pero non será nesta sala, porque aquí toca falar dos asuntos do Goberno de Galicia. Non hai novidade».

La sala a la que se refiere es la que se ha habilitado para las ruedas de prensa del Consello da Xunta, en la que ayer se daban cita los periodistas que siguen de ordinario la información relativa al presidente y algunos menos habituales de medios nacionales que le llevaron a usar el gallego y el castellano. A estos se atrevió a darles un consejo práctico: «Me agrada verles, pero no se desplacen conmigo (a sus actos) porque no van a encontrar una respuesta distinta, tengan la seguridad. Les voy a convocar para ello».

Pero sí hubo algo distinto en sus respuestas. Cuestionado sobre si mantiene firme su compromiso repetido como un mantra de que su intención es agotar el mandato en Galicia en el 2020, volvió a referirse a esa misma convocatoria pública para obtener contestaciones «puntuales y concretas», pero dejó abierta la puerta a un nuevo discurso: «Se cambiara de opinión, non teña ningunha dúbida que o diría», sostuvo tras proclamar que él es presidente de la Xunta y que no tiene más compromisos adquiridos.

Esa convocatoria a la que se refiere tampoco tiene fecha, pero no será antes del lunes. «Daré mi opinión a lo largo del plazo que marque la junta directiva que convoque el congreso. Me posicionaré, porque es mi obligación como presidente del PPdeG y como militante, y es lo que voy a hacer».

Aznar, solo un «bo presidente»

Feijoo, que en la ejecutiva del PP del pasado martes indicó que sus grandes referentes al frente del Gobierno de España han sido Adolfo Suárez y Mariano Rajoy, también abordó la propuesta de José María Aznar de pilotar la refundación del centroderecha, realizada horas después de la crisis que desalojó al partido del poder. Para el de Os Peares, el ahora referente de la Fundación Faes «foi un moi bo presidente para España e para os españois, e aí me quedo». Sin embargo, amplió su respuesta al valorar que sus mandatos tuvieron más luces que sombras, «e iso é o importante. O que fai despois -de salir del Gobierno- é unha opinión máis persoal e menos política».

Cambio de planes en Galicia

El presidente de la Xunta también reconoció que los últimos cambios en el PP a nivel nacional van a afectar a «decisións que estabamos meditando», en referencia a la presentación de candidatos municipales y a la consecuente crisis del gobierno autonómico, ya que al menos dos conselleiros, Beatriz Mato y José Manuel Rey, van a salir del Ejecutivo para liderar las candidaturas de A Coruña y Ferrol. Feijoo admitió que esos movimientos, así como la presentación del resto de las candidaturas urbanas, se demorarán algo más a la espera de un escenario más estable, pero limitó el «impacto» a semanas y no a meses. El partido había planificado una presentación escalonada de los principales cabezas de cartel con un gran acto conjunto posterior que sirviese de auténtico pistoletazo de salida, pero toda esa idea basculará hacia finales del verano, «que finaliza o 21 de setembro», recordó.

Feijoo finalizó su particular sesión de control semanal ante la prensa reclamando «sosiego para pensar y acertar, porque sobra ansiedad. Intento ser coherente y responsable, pero tampoco oculto que no es fácil».