La carga subida en Peinador aplastó a los cinco fallecidos en el siniestro de octubre. No respondieron a la alarma del avión
25 dic 2019 . Actualizado a las 22:41 h.El avión Antonov de Ukraine Air Alliance que se estrelló tras partir de Vigo con piezas de automoción en la mañana del 4 de octubre causando la muerte a cinco de sus ocho ocupantes, volaba con uno de sus cuatro motores sin ser revisado en talleres desde el año 2000. Esa es una de las circunstancias apuntadas por la Oficina Nacional de Investigación de Accidentes Aéreos de Ucrania en el informe preliminar sobre dicho siniestro, al que ha tenido acceso La Voz.
La investigación revela que el motor número cuatro de este carguero, que ya había operado en varias ocasiones en el aeropuerto de Peinador, «se fabricó el 1 de enero de 1972, habiendo acumulado 10.962 horas de vuelo en 5.632 ciclos [arranques]. Pasó por última vez una revisión en el taller el 12 de septiembre del año 2000, 6.520 horas de vuelo y 2.424 ciclos antes del accidente». Añade el informe, sin embargo, que la renovación de su certificado de idoneidad fue obtenido en septiembre de este año.
Las investigaciones oficiales señalan que el motivo que desencadenó el aterrizaje de emergencia iniciado en las proximidades de la localidad de Leópolis (o Lviv, en Ucrania) fue la falta de combustible detectada por la tripulación en su vuelo entre Vigo y Bursa (Turquía), y que fue comunicada a la torre del aeropuerto ucraniano donde se dirigía a repostar. Pero de Vigo partió con 13.500 litros en sus depósitos, por lo que aún queda por determinar por qué se hizo insuficiente una cantidad considerada más que sobrada para llegar a su escala en Ucrania. La longevidad del motor, el más antiguo de los cuatro del avión, y el tiempo transcurrido desde su última revisión a fondo, podría dar alguna pista sobre posibles fugas de combustible.
La Oficina de Investigación ucraniana sí destaca que «la tripulación no proporcionó ningún aviso crítico» respecto a fallos mecánicos del aparato. Sí advirtió la torre que «grandes bandadas de pájaros se encuentran en el área final del aeródromo», pero no se incide en su implicación en el accidente. «El vuelo se realizó en condiciones climáticas difíciles», confirman los investigadores aéreos, que destacan que según los datos registrados del vuelo, a una altitud de 60 metros sonó una alarma de que se había alcanzado la altura de decisión», el punto último en el que se puede abortar el aterrizaje. ««Ningún miembro de la tripulación respondió».
El aparato se estrelló a 1,3 kilómetros de la pista tras tocar antes con unos árboles. Cinco de sus ocho tripulantes perdieron la vida. «La carga se había movido y aplastó a los ocupantes» en la cabina, añade el relato oficial, que cifra en 13 toneladas el peso de las piezas para asientos de automóviles cargadas en Vigo y fabricadas en O Porriño.
El avión había volado el día antes de Toronto a Toulouse.