El hermano de la coruñesa desaparecida cuatro años: «Nos hemos quitado una preocupación»
GALICIA
La mujer, que se marchó voluntariamente en el 2016, no quiere contactar con su familia
09 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.«Por el momento no sé nada». Así responde el hermano de la coruñesa desaparecida en el 2016 en Lugo y encontrada el pasado martes, día 5, por la Policía Nacional en la localidad gallega en la que ahora reside y de la que no quiere que se proporcionen datos porque no quiere volver con su familia. El hermano explica que la policía lo llamó el mismo martes por la tarde para comunicarle que su hermana había aparecido, que se encontraba en buen estado, y que había desaparecido voluntariamente: «Me llamó un policía y me dijo que mi hermana está bien y que ya me irán informando con más detalle a lo largo de esta semana».
Sin embargo, es muy probable que no le cuenten muchas más cosas sobre lo ocurrido en los últimos cuatro años, ya que su hermana les dijo a los primeros policías con los que se entrevistó que no quería contactar con su familia y que tampoco quería que se diese información de su paradero. La mujer había desaparecido el 1 de noviembre del 2016. Esa es la fecha desde la que su familia no volvió a tener noticias de ella. Solo sabían que residió en Lugo, y así lo explicaron un año después en la comisaría de A Coruña en la que pusieron la denuncia por desaparición.
Desde ese momento se puso en marcha el protocolo policial de búsqueda adulto desaparecido. Se hicieron entrevistas con amigos, con allegados y se analizaron sus últimos movimientos. Pero no había ni rastro. Ningún detalle. «Cuando una persona adulta decide desaparecer voluntariamente, es muy difícil dar con ella, porque hace todo lo posible para que no la encuentren», explica un inspector experto en la investigación de todo tipo de desapariciones.
Lo mismo parece haber pasado en este caso. La mujer decidió marcharse y desaparecer. Pasó a engrosar la lista de identidades perdidas que coordina el Centro Nacional de Desaparecidos, dependiente del Ministerio del Interior. Su nombre, su pelo, su color de ojos, su altura, algún rasgo físico. Su ficha se publicó en la potente base de datos de la Comisaría General de la Policía Nacional. Los investigadores en desapariciones de A Coruña estaban preocupados al haber pasado tanto tiempo sin tener ninguna noticia de la mujer, hija de una farmacéutica coruñesa muy conocida y ya fallecida.
«Estoy muy contento»
Por eso reactivaron el caso. Volvieron a hacer preguntas y difundieron su imagen en las redes sociales especializadas. Pero nadie sabía nada. Hasta el martes, cuando un hombre reconoció a la mujer que buscaban en la foto que publicó La Voz. Era su vecina. La policía ya no tuvo problemas para encontrarla, después de cuatro años. «Estoy muy contento y agradecido a la policía», dice el hermano tras saber que su hermana está bien. «Nos hemos quitado una gran preocupación», asegura.