El BNG fija su asamblea nacional para el 7 de noviembre con el reto de ensanchar su base social
GALICIA
Ana Pontón asegura que el objetivo consiste en multiplicar la presencia en los concellos «como preámbulo para liderar a Xunta»
26 jun 2021 . Actualizado a las 16:26 h.Ahora que la pandemia de coronavirus empieza a remitir y que ya es posible salir a los espacios abiertos sin mascarilla, el BNG considera que también ha llegado el momento de abordar una de sus tareas pendientes: la puesta a punto de la organización y la afinación del proyecto político. La formación que dirige Ana Pontón, que este sábado reunió a su consello nacional en Santiago, celebrará su próxima asamblea nacional el 7 de noviembre con un reto muy preciso, que consiste en ensanchar sus bases y en multiplicar su presencia en los concellos dentro de dos años «como preámbulo para liderar a Xunta» a partir del 2024.
En la intervención abierta a los medios que pronunció ante los miembros del máximo órgano del BNG, Pontón dijo que era el momento de reconocer el coraje y el comportamiento mantenido durante la pandemia por la mayoría del pueblo gallego, pero muy especialmente por los profesionales sanitarios, las personas implicadas en la campaña de vacunación, los trabajadores de las residencias de mayores y todas aquellas personas que han perdidos a seres queridos en la crisis del covid-19. «Agora que enfilamos o camiño cara a normalidade», dijo, también es el momento de abordar cuestiones pendientes para que el Bloque pueda recuperar su capacidad organizativa y de interacción con sus militantes y simpatizantes.
Hace ya más de cuatro años que la organización frentista celebró la XVI asamblea nacional, la última, a la que debería seguir otra cita congresual la pasada primavera. La pandemia lo impidió, pero el BNG está decidido a recuperar el tiempo perdido para fijar la cita presencial para el próximo mes de noviembre, fecha para la que estima que Galicia y habrá alcanzado la inmunidad de rebaño frente al covid-19.
La asamblea nacional de noviembre —indicó Pontón— será «o punto de partida para recuperar o cen por cen da actividade organizativa» y para continuar con la tarea de «sumar máis cidadanía ao BNG». Los nacionalistas se marcan el objetivo de fortalecer el partido, ensanchar sus bases de apoyo en paralela a la defensa de los intereses de Galicia para que todo ellos se pueda visualizar en las elecciones municipales del 2023. Y es que el verdadero reto consiste en «dar un paso adiante nos concellos dentro de dous anos», añadió la portavoz nacional, para multiplicar la representación local del Bloque como preámbulo para liderar después la Xunta.
El BNG se ve a sí mismo como la «alternativa» al Gobierno de Núñez Feijoo para liderar «un futuro diferente» que apueste «polo orgullo do noso» y que ponga «a riqueza de Galicia ao servizo da nosa xente». La fuerza que lidera la oposición en Galicia se muestra libre de ataduras -«o BNG non é correa de transmisión nin de Casado nin de Sánchez»- y con la mochila vacía, a diferencia de un Feijoo al que Pontón retrata como «un devoto practicamente do centralismo madrileño», y que, dijo, no sabe defender a Galicia cuando corresponde.