Ultimátum de Renfe a Talgo: a los 166 millones de la reclamación añadirá 80.000 euros por cada día de retraso de los Avril

Pablo González
pablo gonzález REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

El tren de muy alta velocidad Avril, en la línea Madrid-Valladolid
El tren de muy alta velocidad Avril, en la línea Madrid-Valladolid

La demora es para la operadora pública «un flagrante incumplimiento de las obligaciones contractuales» del fabricante

09 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Coincidiendo con la opa de un grupo húngaro con vínculos en Rusia que pretende apropiarse de Talgo con la oposición del Gobierno, Renfe ha remitido un duro ultimátum al fabricante ferroviario para que se tome en serio la entrega de los trenes de muy alta velocidad de la serie 106 (Avril), que deberían haber empezado a ser cedidos a la operadora hace tres años y que acumulan una sucesión de incumplimientos de los plazos que fijó Talgo en los últimos meses. El último, la imposibilidad de tenerlos en servicio antes del 31 de marzo.

En una carta remitida por Renfe el 6 de marzo al consejero delegado de la compañía, Gonzalo Urquijo, la operadora pública le recuerda a Talgo que sigue sin entregar los trenes, «lo que constituye un flagrante incumplimiento de sus obligaciones contractuales que está causando, a Renfe en particular y a los usuarios del transporte ferroviario en general, importantes perjuicios», aseguran en el documento.

Ante esta situación, Renfe hace «expresa reserva de cuantos derechos nos asisten a resarcirnos de la totalidad de los daños y perjuicios causados». En este sentido mencionan la reclamación que ya publicó hace unos días La Voz, que suma a las penalizaciones del contrato (que ascendían a 116,6 millones de euros) otros 50 millones por lucro cesante, el dinero que la operadora pública ha dejado de ingresar en todo este tiempo por la demora. En total, 166,6 millones de euros.

La novedad del ultimátum es que Renfe anuncia una actualización de estos daños, «que se contabilizarán de manera diaria a partir del 1 de abril del 2024», a razón de 80.000 euros por día hasta que se sustancie la entrega del nuevo material rodante. «Es por ello que le solicitamos que concluya de manera satisfactoria y con el grado de calidad contractualmente requerido los trabajos pendientes a la mayor brevedad», concluyen.

También se hace referencia a la documentación aportada por el fabricante para argumentar las razones de los retrasos. Sobre este asunto, Renfe alega que en ningún caso puede servir para justificar que la demora en la entrega «no sea atribuible a Talgo».

La operadora pública muestra su sorpresa ante el hecho de que la empresa fabricante no haya elaborado un análisis que se le solicitó sobre este asunto, relacionado con los problemas de fiabilidad de las treinta unidades del contrato, quince de ancho fijo y otras quince de ancho variable que son las que pueden circular por toda la red ferroviaria gallega. Talgo alegó que necesitaba noventa días para elaborarlo. Renfe no acepta ese plazo y conmina a la compañía fabricante a que presente la documentación que le solicitó antes del 15 de marzo.