Sí se reunió este viernes con el lendakari, que tomó posesión dos meses después
27 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Alfonso Rueda tomó posesión como nuevo presidente de la Xunta el pasado 12 de abril, casi dos meses después de celebrarse las elecciones autonómicas en Galicia. El 10 de mayo envió una carta a Moncloa para mantener una reunión con Pedro Sánchez; dos semanas después, hubo respuesta del Gobierno central aceptando el encuentro, pero sin fijar una fecha. Y hasta hoy no ha habido noticias. Tampoco parece que vaya a haberlas pronto. Porque fuentes de Moncloa apuntan a que el jefe el Ejecutivo español no tiene ahora mismo previsto en su agenda hacer una visita institucional a Galicia ni reunirse con el presidente gallego. Tampoco descartan que eso suceda más adelante.
Mientras tanto, Pedro Sánchez se reunió ayer en Vitoria con el lendakari Imanol Pradales, que tomó posesión de su cargo el 22 de junio, es decir, más de dos meses después que Alfonso Rueda. La semana pasada fue el turno de Pere Aragonés, ahora en funciones, y que ni siquiera sabe si será investido.
El calendario muestra que Galicia, dentro de las tres nacionalidades históricas, es la única que falta de la ronda de encuentros institucionales y fue precisamente la comunidad que celebró primero sus elecciones.
«Eu non teño nada en contra de que se reúna cos restantes presidentes autonómicos —dijo ayer Rueda durante una vista a Ferrol—, o que non ten moito sentido, e paréceme unha falta de cortesía institucional, e que sendo o primeiro que tomou posesión sigamos agardando».
En su valoración, el presidente gallego se refirió también al resto de comunidades que siguen esperando también, mientras Sánchez sí tiene en consideración con un trato preferente a las comunidades que sí le interesan por puro cálculo político y en aras de la estabilidad de su gobierno.
«Isto non é de recibo e non pode ser que Galicia sexa unha vez máis adiada, ignorada». Según la Xunta, en su respuesta del 27 del mayo, el presidente Sánchez apeló a la celebración de las elecciones europeas para posponer el encuentro con Rueda asegurando que la reunión tendría lugar inmediatamente después. Sin embargo, no volvió a haber noticias y sí ha habido encuentros con los máximos mandatarios del País Vasco y de Cataluña.
«A mínima cortesía institucional, o respecto que se merece Galicia e a urxencia dos temas que lle queremos plantexar demandarían outro trato por parte do presidente do Goberno; eu agardo que se dea conta de que esta actitude non é de recibo e rectifique», insistió Rueda.
Mientras Sánchez abordó ayer en Vitoria con Imanol Pradales cómo avanzar en los traspasos de competencias al País Vasco dentro del margen que otorga el Estatuto, Galicia está a la espera, por ejemplo, de ver qué decide el Gobierno central con el traspaso de la AP-9, una demanda aprobada por unanimidad en el Parlamento gallego y que ha sido ninguneada sistemáticamente desde hace 15 años por parte del Gobierno central, tanto en tiempos de Mariano Rajoy (PP) como de Pedro Sánchez (PSOE).
La financiación
No es el único asunto que urge a esta comunidad. Porque en primera línea se sitúa también el modelo de financiación autonómica. Mientras Cataluña reclama un trato singular, Galicia defiende la revisión de un modelo que no valora como debe aspectos diferenciales de esta comunidad, como son la dispersión poblacional y el envejecimiento, dos características que disparan el gasto público en sanidad, educación y servicios sociales (sobre todo el servicio de ayuda a la dependencia).
Galicia también reclama la gestión del dominio marítimo público-terrestre, después de que el pasado 23 de abril del 2024 el Tribunal Constitucional avalara por unanimidad la ley del litoral, dando la razón a la Xunta sobre sus plenas competencias sobre el mismo.
El PP lamenta la carta de Puente en plan «sujétame el cubata» y este aviva la polémica
La carta enviada por el ministro Óscar Puente al presidente gallego — en la que le invita a que Galicia pague la alta velocidad a Portugal por unas declaraciones de un eurodiputado del PP en la que le atribuía el mérito de la conexión a Rueda— desencadenó ayer duras críticas desde las filas de los populares gallegos. Alberto Pazos, portavoz del grupo parlamentario, sostuvo ayer que «unha comunicación dirixida a unha administración no debería redactarse baixo o principio de ‘sujétame el cubata’». El dirigente del PPdeG lamentó los continuos retrasos de los trenes de media distancia en la comunidad, así como los fallos e incidencias en los trenes Avril y Avlo de alta velocidad que unen Galicia con Madrid. Pazos pidió a Puente que trabaje más por el entendimiento entre administraciones y no por la confrontación en lugar de dedicase a escribir cartas «pouco afortunadas con formas menos afortunadas».
El ministro de Transportes avivó ayer la polémica con un hilo en X (antigua Twitter) en el que reproduce las declaraciones de Adrián Vázquez (en las que aseguraba que Rueda había hecho más por la alta velocidad en cinco meses que Sánchez en seis años), la carta enviada a Rueda y en el que acusa al presidente de la Xunta de seguir la estela de Feijoo de querer apuntarse tantos políticos sobre una materia en la que no tiene competencias. Y vuelve a recordar la promesa del expresidente de la Xunta de querer financiar el AVE entre Lugo y Ourense.