Nuevo lío en el Parlamento con bronca entre el presidente Santalices y la vicepresidenta Montse Prado, del BNG

Manuel Varela Fariña
Manuel Varela SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Santalices pidiendo calma desde la presidencia del Parlamento, junto a Montse Prado, del BNG.
Santalices pidiendo calma desde la presidencia del Parlamento, junto a Montse Prado, del BNG. Sandra Alonso

Los nacionalistas elevarán una queja formal después de que el jefe del legislativo rechazase darles la palabra

06 nov 2024 . Actualizado a las 13:51 h.

La sesión de control en el Parlamento gallego terminó como el último pleno, con bronca. Entonces el intercambio dialéctico se produjo entre compañeros de partido: la número dos del PP, Paula Prado, y el presidente de la Cámara, el también popular Miguel Santalices, después de que este rechazase darle la palabra tras solicitarla por alusiones la diputada. Santalices fue de nuevo protagonista, por un asunto similar, pero enfrente tuvo al BNG. Y también a su vicepresidenta segunda, la nacionalista Montse Prado.

La portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, terminaba su primera intervención instando al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, a acceder a negociar con los nacionalistas el listado de comparecientes en la comisión de investigación sobre los contratos menores del Gobierno gallego, cuya Mesa se reunirá este jueves para consensuar su plan de trabajo, que será votado el viernes. Acusó al portavoz de los populares, Alberto Pazos, de haberle trasladado al interlocutor de su grupo en la comisión, Luis Bará, que su partido iba a terminar imponiendo su criterio, valiéndose de la mayoría absoluta que disponen la Cámara. «Rectifique e negocie o plan de traballo da comisión de investigación», le exhortó Pontón. 

Una vez finalizado el debate entre Rueda y los portavoces de la oposición, Alberto Pazos pidió la palabra a la Presidencia en virtud del artículo 76.1 del reglamento, por inexactitudes sobre un diputado aludido. Santalices, sobre quien recae la decisión de otorgar ese turno, le cedió la palabra sin cortapisas. «Ou minte a señora Pontón ou lle minten», valoró Pazos, quien rememoró la llamada con el interlocutor del Bloque, sin llegar a citar su identidad, para conocer la voluntad de los nacionalistas de alcanzar algún acuerdo sobre el plan de trabajo de la comisión de investigación. «O único que se me dixo é que se quería retrasar. Están retrasando os trámites», insistió el dirigente popular, que con su intervención agitó a los diputados nacionalistas. «Deixe de mentirlle aos galegos, e menos en sede parlamentaria», reclamó a Pontón, que en ese momento se giraba hacia su diputado Luis Bará para que pidiese la palabra.

Así lo hizo el viceportavoz del Bloque, pero Santalices se apoyó en el reglamento para recordar que el turno solo puede ser concedido «a xuízo da Presidencia». El argumento para su negativo causó aún mayor revuelo entre los parlamentarios del Bloque, incluida la viceportavoz segunda de la Cámara, Montse Prado, sentada a la izquierda del jefe del legislativo y gesticulando con vehemencia para mostrar su malestar. Santalices solicitó institucionalidad a la nacionalista, y la conminó a moverse a su escaño si no lo hacía. «Para min está pechado este debate», zanjó el presidente del Parlamento pese a la insistencia de Pontón y los suyos, que a continuación se retiró del hemiciclo, visiblemente enfadada, junto a Bará en dirección a sus oficinas. Los nacionalistas convocaron de urgencia a los medios una hora después.  

Queja contra la Presidencia

El diputado Luis Bará manifestó que lo que acababa de suceder en el pleno evidenciaba la «incomodidade ao respecto do obxecto e contido desta comisión de investigación», y avanzó que su grupo no se sentirá «amedrentado» por esta actitud. «Imos utilizar todos os medios para poñer de relevo todas as irregularidades e chanchullos do Partido Popular», defendió.

El viceportavoz del BNG relacionó la bronca con el presidente del Parlamento con el «rifirrafe da semana pasada coa señora Paula Prado». «Chamárono ao redil popular, á obediencia, aos mandatos e a que cumpra non a súa función institucional como presidente do Parlamento, senón que atenda ao ditado do Partido Popular», razonó Bará, quien avanzó que su grupo presentará una queja formal por ello.

Los populares dieron la réplica con su propia rueda de prensa, hora y media después, en la que Alberto Pazos señaló a los nacionalistas por ser ellos quienes, en realidad, buscan dilatar la tramitación de la comisión. «O grupo propoñente que nos exixe celeridade, unha vez máis fai todo o posible para que se demoren eses plans», protestó.

El PSdeG, sin presencia en la Mesa de la comisión donde se enfrentan populares y nacionalistas, emitió un comunicado esta mañana para acusar al PP de «torpedear esta comisión dende o primeiro momento».