Las víctimas del Alvia creen que la Fiscalía «hace el ridículo» defendiendo al excargo del ADIF en el caso de Angrois
GALICIA
Los afectados han tenido acceso a la auditoría de la UE sobre el sistema ferroviario español, en la que se detectan serios vacíos de seguridad «que refrendan la sentencia»
28 nov 2024 . Actualizado a las 11:45 h.La plataforma de víctimas del Alvia sostiene que la auditoría abierta a raíz del accidente de Angrois por la Comisión Europea, a cuyas conclusiones han tenido acceso, revela que no se cumplían «los requisitos de la legislación de la UE sobre seguridad ferroviaria», al tiempo que cargan contra la Fiscalía por recurrir la condena a dos años y medio de cárcel del exdirector de Seguridad en la Circulación del ADIF, Andrés Cortabitarte.
La auditoría, que refleja serios vacíos de seguridad en el sistema ferroviario español, «refrenda la sentencia del Alvia y deja en ridículo» al fiscal Antonio Roma «tratando de exculpar al ADIF». «La Fiscalía no solo hace el ridículo, sino que además no cumple con la obligación constitucional y legal de defender a la sociedad asegurando el cumplimiento de las leyes», aseguran.
Los integrantes de la plataforma recuerdan que en junio del 2014 mantuvieron una reunión con el fiscal en la que le solicitaron que investigara el incumplimiento de la directiva comunitaria de Seguridad. «Su respuesta fue que estuviéramos tranquilos, que iba a pedir un 40 % más de indemnizaciones». «El fiscal Antonio Roma no quiso investigar, pero en cambio sí trató de comprarnos y silenciarnos. Un títere más al servicio del Estado para ocultar las negligencias, los incumplimientos de la normativa y evitar las responsabilidades políticas», concluye el comunicado de las víctimas del accidente ferroviario.
El informe investigaba, recuerdan desde la plataforma en un comunicado, si se estaban haciendo evaluaciones de riesgo adecuadas, «pieza elemental por la que se condenó al exdirector de seguridad del ADIF».
Entre las obligaciones que se recogen en la Directiva de Seguridad figura disponer de un sistema de gestión «que debe incluir procedimientos y métodos para llevar a cabo la evaluación de riesgos y para aplicar las medidas de control del riesgo siempre que un cambio en las condiciones de funcionamiento o un nuevo material suponga nuevos riesgos en la infraestructura o en los servicios». En Angrois, donde murieron 80 personas, recuerdan que el ADIF «no realizó el análisis de riesgos, ni se aplicaron medidas de control de riesgo», algo que ocurrió «al menos en dos ocasiones: al emitir personalmente Cortabitarte el certificado de seguridad, sin el cual la línea de alta velocidad 082 no podría entrar en servicio, tras la modificación del proyecto que rebajó la seguridad», y «autorizando la desconexión del sistema de seguridad por los retrasos que generaba».
Para las víctimas, la auditoría del Ejecutivo europeo «es demoledora». Entre otras cosas explican que dicho informe destaca que «la Comisión considera motivo de preocupación el hecho de que los sistemas de gestión de la seguridad de diversas empresas del sector ferroviario en España no se empleen como principal instrumento para el control de riesgos y la mejora permanente de la seguridad del sistema ferroviario, como exige la Directiva 49/2004».
El documento certifica que las graves deficiencias encontradas por la auditoría suponen un incumplimiento de las directivas del paquete ferroviario y concluye: «No parece existir nexo alguno entre la evaluación del riesgo y la vigilancia. Sin vigilancia, es imposible saber si el riesgo se encuentra efectivamente bajo control».