Iryo recoge el guante del ADIF y prevé competir con Renfe en Galicia a finales del 2026

Pablo González
pablo gonzález REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Un tren de Iryo en la estación de Valencia
Un tren de Iryo en la estación de Valencia Rober Solsona | EUROPAPRESS

El consejero delegado de la operadora hispanoitaliana también muestra su interés por la conexión con Portugal, aunque en este caso cree que es necesario avanzar en el desarrollo de la infraestructura

20 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

La compañía hispano-italiana Iryo, uno de los dos competidores de Renfe en los corredores de alta velocidad ya liberalizados, siempre mostró su interés en operar en Galicia al asistir como testigo a la gran revolución ferroviaria que ha vivido la comunidad en los últimos años. Desde la puesta en servicio del último tramo de la línea de alta velocidad el 21 de diciembre del 2021 -este sábado se cumplirán por tanto tres años-, se ha duplicado el número de viajeros en larga distancia, mientras que en la red interior se ha consolidado un importante contingente de viajeros recurrentes que en muchos casos han renunciado al vehículo privado para cumplir con sus rutinas diarias. El único problema es que cualquier operadora que quiera operar en Galicia necesitará tener trenes con ancho variable para superar la barrera técnica del cambio al ancho ibérico en Ourense, algo que la Comisión Europea cree que es necesario modificar en los próximos años para tener una red de alta velocidad interoperable en un espacio ferroviario europeo único.

Esto no ha impedido que el ADIF pusiera sobre la mesa hace dos meses las condiciones básicas de la segunda fase de la liberalización ferroviaria, en la que está incluida Galicia y Asturias, entre otros destinos, para lo que ha liberado 32 servicios o surcos en el corredor de alta velocidad que conecta las ciudades gallegas con Madrid. Iryo parece que ha recogido el guante del administrador ferroviario, de forma que el consejero delegado del operador ferroviario, Simone Gorini, reiteró este jueves el interés de esa compañía por operar no solo en Galicia, sino también en Portugal. «Estamos muy interesados en esta segunda fase de liberalización y estamos listos para aprovechar eventuales oportunidades, en particular en Galicia, que es una conexión que nos interesa mucho», subrayó Gorini en un desayuno informativo organizado por las patronales CEOE y Cepyme, informa Efe.

El único problema para esta expansión territorial, recordó, es la altísima inversión que se precisa para adquirir el nuevo material rodante de eje desplazable y la escasa oferta disponible, con solo dos fabricantes, Talgo y CAF, que disponen de esta tecnología. Otra opción sería alquilar algún tren a Renfe o aprovechar el surco que conecta solo con Ourense, previsto por el ADIF, para el que podrían aprovechar sus trenes actuales.

La operadora, que cuenta con una participación de la pública TrenItalia, también está interesada en llegar a Portugal, algo que Gorini admitió que no está en manos de la compañía, sino que depende de los progresos de la inversión en la infraestructura en ambos países. «Seguimos convencidos de que la conexión entre España y Portugal es muy importante para el desarrollo de la península Ibérica», dijo. De hecho, la conexión A Coruña-Oporto-Lisboa propuesta por Iryo ha sido una de las elegidas por la Comisión Europea para activar conexiones transfronterizas.

Actualmente, Iryo cuenta con 20 unidades de los trenes Flecha Roja, fabricados por Hitachi y Almstom, y espera adquirir tres más a lo largo del 2025, año en el que pondrá en marcha una ruta transversal entre Barcelona y Málaga. Para Gorini, parte del secreto de la buena marcha de la compañía es la calidad del tren elegido, que calificó como «el Ferrari del ferrocarril». Su puesta en marcha, aseguró, apenas suscitó problemas técnicos, pues contaron siempre con el apoyo de los fabricantes, algo que contrasta con los primeros meses de funcionamiento de los trenes de alta velocidad de la serie 106 (Avril) de Renfe.