La madre de Arantxa Sánchez Vicario: «He recuperado a mi hija»

C. Barbería REDACCIÓN

GENTE

THOMAS SAMSON | AFP

«Ahora hablamos todas la noches» cuenta Marisa Vicario sobre la relación actual con su hija tras su separación de Josep Santacana

25 jun 2018 . Actualizado a las 08:11 h.

En febrero la vida de Arantxa Sánchez Vicario dio un dramático vuelco. Su marido, Josep Santacana, le pidió pidió el divorcio, llevándose supuestamente todos sus bienes ya que, desde su boda, era el empresario el que gestionaba el patrimonio de la tenista en sustitución de sus padres. «Yo estaba ciega y no lo veía, pero él me incitaba: yo me iba separando de mis amigos; de mi familia, de mis amigos del tenis, para que estuviéramos mejor», reconoció la deportista días después de saltar a los medios de comunicación la noticia de su separación.

Tras este mazazo, la buena noticia para Arantxa Sánchez Vicario fue el acercamiento a su familia, con la que que había roto a raíz de su matrimonio con Josep Santacana. Marisa Vicario, madre de la deportista, ha declarado a La Otra Crónica de El Mundo que, a pesar del lógico sufrimiento por la situación y el futuro de su hija, ahora está «contenta». «Estoy contenta porque la he recuperado. Se ha visto tan mal que ha vuelto a su familia. Ahora hablamos todas las noches», ha dicho la madre de la tenista a la publicación. 

Aunque en un primer momento trascendió la información de que Josep Santacana había pedido la custodia de los dos hijos de la pareja, Arantxa y Leo, de 9 y 7 años, lo cierto es que el exmarido de la tenista no ve a los niños desde hace cuatro meses. «Yo estuve en Miami para el cumpleaños de la niña y allí no llamó nadie. No aparece ni se interesa por ellos», explica a LOC Marisa Vicario. 

Añade que Santacana retiene los pasaportes de sus hijos de forma que «Arantxa no puede venir a España con ellos». 

Sobre el asunto de la fortuna, Marisa Vicario es clara. «Cuando se casó con Santacana, mi hija tenía muchas y buenas propiedades. Todo desapareció, se lo ha quitado todo», denuncia. Desde el entorno del exmarido de Arantxa niegan estos hechos y aseguran que en el momento de la boda la tenista solo tenía «deudas» y que vendieron cosas para pagarlas. Destacan que Santacana «tenía buenos negocios en Florida», cuentan a La Otra Crónica.

«Yo a este individuo no le he vuelto a dirigir la palabra desde el día de la boda», subraya Marisa Vicario sobre su exyerno.

En febrero, Arantxa Sánchez Vicario ya habló sobre la reconciliación con su familia y confesó que no hicieron falta muchas palabras y que simplemente pidió perdón «a quienes se lo tenía que pedir».

También reconoció que fue un «error» haberle dado el control a Santacana de todo lo que tenía. «No me arrepiento de haber dado todo por amor», matizó la deportista, pero «tenía que haber separado el amor del resto de mi vida».