Buckingham asegura que «su tratamiento ha avanzado en una dirección positiva y como enfermedad controlada», lo que le permitirá mantener su agenda pública
20 dic 2024 . Actualizado a las 15:04 h.El rey Carlos III continuará en el nuevo año su tratamiento contra el cáncer que padece, cuya naturaleza no se ha revelado en ningún momento a lo largo de este año en que esta enfermedad ha alterado la vida de la familia real británica. Así lo indicó este viernes el canal informativo Sky News.
Según una fuente del palacio de Buckingham citada por este canal de televisión y recogida por Efe, «su tratamiento ha avanzado en una dirección positiva y, como enfermedad controlada, el ciclo de tratamiento continuará el próximo año».
La misma fuente añadió que predomina un sentimiento de optimismo sobre la dolencia del monarca, que se evidencia en su deseo de continuar con su cargada agenda pública a lo largo de las fiestas navideñas.
El pasado febrero el palacio informó que de Carlos III había sido diagnosticado de cáncer, aunque no detalló de qué tipo ni su pronóstico. Fue dos semanas después de que se anunciase que el rey Carlos III pasaría por el quirófano para someterse a una cirugía por «agrandamiento de próstata» y lo único que se precisó fue que el cáncer no tenía nada que ver con dicha glándula pélvica. Tampoco se ha revelado en ningún momento cuál es el tratamiento que está siguiendo el hijo de Isabel II para luchar contra el cáncer.
La familia real británica cerrará este 2024 uno de sus años más aciagos, con la enfermedad que sufre el rey pero también su nuera, la princesa de Gales, Catalina Middleton, quien anunció en septiembre que ha completado su tratamiento con quimioterapia contra el cáncer que le fue diagnosticado en enero y cuya naturaleza también se desconoce.
En un primer momento, los médicos recomendaron al monarca que pospusiese sus actos públicos durante dicho tratamiento, por lo que durante un tiempo fue reemplazado en muchas de sus funciones públicas por otros miembros de la familia real. No obstante, continuó despachando semanalmente con el primer ministro y firmó leyes y otros actos legales que requerían de su rubrica para entrar en vigor. Después, poco a poco fue retomando su vida pública.