El técnico recalca que la ambición del equipo es lograr los nueve puntos en juego esta semana
02 abr 2019 . Actualizado a las 13:04 h.El técnico del Celta, Fran Escribá, ha destacado esta mañana la importancia del duelo frente al Huesca y mantiene que el equipo es ambicioso respecto a esta semana de tres partidos tras haber sumado los tres primeros puntos. «Por ambición queremos los nueve puntos y, aunque siete de nueve se ve como un buen resultado, de entrada queremos los nueve».
Para el entrenador valenciano, el de El Alcoraz es «un partido muy importante», en primer lugar porque supondría enlazar dos victorias. «Podríamos ver el futuro de otra forma, aunque no habría nada hecho», avisó al mismo tiempo. De cara a este partido, «Aspas está perfecto, como todos», aseguró.
Es consciente de que no será un partido nada fácil ante un rival que pelea por el mismo objetivo y al que valoró positivamente. «El Huesca no se entrega nunca, sigue luchando y cree en la salvación. Va a ser un partido incómodo», advirtió. Además, no cree que estén acusando su posición de colistas: «No los veo con ansiedad, ni antes ni ahora. Es un equipo que tiene buenos futbolistas, les está condicionando».
En concreto, se detuvo en Enric Gallego, de quien dijo que «es un ídolo, un jugador grande, que aguanta bien el balón y tiene facilidad para el gol». Volviendo al partido, afirmó: «A nivel de fútbol cuando ataquemos nos puede hacer daño, las acciones de juego directo son potentes y debemos defender lo más lejos posible». La mejora defensiva en la segunda parte del partido del sábado respecto a la primera debe marcar el camino, pues apuntó a ella como una de las claves de la remontada y añadió que «mañana va a ser vital». Respecto al ambiente, no cree que vaya a influir.
Además, Escribá habló de nombres propios, en concreto de los dos descartes del sábado. De Fran Beltrán dijo que «es un ejemplo de jugador y te duele dejarle fuera», si bien entiende que el partido el «dio la razón». En cuanto a Néstor Araujo, aclaró que «aparte del viaje, vino medio enfermo, pero ahora ya está bien».
Se refirió, asimismo, a Cabral, destacando la importancia que tiene en el grupo después de siete años como futbolista del equipo: «Lo primero, es uno más y se puede contar con él, y lo segundo, es un soporte para este vestuario. Lo llevé al Bernabéu para que estuviera con el grupo y fue uno de los que hizo una arenga a pesar de quedarse fuera».