«En la primera expulsión no hay ni falta de Sáenz, es involuntaria»

x. r. c. VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

M.Moralejo

El excolegiado García de Loza califica de «decisión errónea» la roja y cuestiona el intervencionismo de VAR en el arranque de la presente temporada

17 sep 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Raúl García de Loza, excolegiado internacional de Primera División y analista arbitral de Onda Cero, no tiene ninguna duda de que Jorge Sáenz no debió ser expulsado en el partido con el Granada del domingo y aclara que la jugada en cuestión nada tiene que ver con la de Maxi Gómez y Lenglet en el Camp Nou, que sí merecía la roja el valencianista. El coruñés cuestiona también el creciente intervencionismo del VAR y se une a la corriente de quienes piensan que el videoarbitraje necesita un giro de 90 grados.

De Loza no tiene dudas con respecto a la jugada protagonizada por Jorge Sáenz y Soldado. «No hay ni falta, es completamente involuntaria. Fue una decisión errónea, no era ni merecedora de amarilla», indicando que en ningún momento el céltico transmite la intención de hacer daño al rival.

Todo lo contrario sucedió en la víspera con Maxi Gómez en el Camp Nou. En este caso sí que debió el árbitro enseñarle la roja al excéltico. «Es completamente diferente. En este partido el atacante del Valencia ya no tenía opción de poder disputar el balón y acaba golpeando en el tendón al defensa del Barcelona (Lenglet), debió ser expulsado».

En su análisis de la ya famosa falta del talón, establece el colegiado una tercera diferenciación tomando como ejemplo la expulsión de Modric, también en Balaídos ante el Celta. «En este caso el jugador del Real Madrid golpea el talón del adversario (Denis), pero sin hacerle daño».

Aunque parece de nueva incorporación, García de Loza precisa que los impactos en el tendón de Aquiles «se sancionan de toda la vida» y de esa manera está recogido en el reglamento desde hace mucho tiempo aunque ahora se haya magnificado el asunto desde el desembarco del VAR.

Preguntado por la segunda expulsión, la de Fran Beltrán, no tiene dudas: es roja y en este caso se aplicó correctamente el reglamento.

Intervencionismo

Más allá de lances puntuales el exárbitro, que se declara para empezar partidario del sistema de videoarbitraje, tiene claro que el intervencionismo del VAR ha crecido de un modo exponencial esta temporada y al mismo tiempo reclama que la decisión final sea siempre responsabilidad del colegiado principal de cada partido. «No me entra en la cabeza que la decisión de una jugada se pueda estar tomando a 600 kilómetros de distancia, el árbitro principal es el que debe decidir».

También cuestiona que las decisiones tarden tanto tiempo. «No se puede estar cinco minutos para resolver una jugada, el sistema tiene que ser mucho más hábil, el fútbol necesita dinamismo y el juego debe ser mucho más fluido de lo que está siendo en la actualidad». «Se está reinterpretando el significado del reglamento», comenta en su análisis mientras asegura que «si el VAR se pone a revisar todas las jugadas encontraría algo en todas, porque el fútbol es un deporte de contacto, no como el tenis».

Frente a esta situación propone que las altas instancias del arbitraje analicen la situación para que el VAR funcione de verdad. «Se puede mejorar seguro», explicando que no entra en que si el sistema de LaLiga es mejor o peor que el de otras ligas extranjeros «pero a mí el que tenemos en España no me gusta».