La llegada de Smolov al Celta es una sorpresa en parte, pero no del todo. Su salida ya no se esperaba porque llega casi en el último día de mercado en España, y a un club que no es de los top de LaLiga, sino que está en una situación complicada. Pero por otro lado, no sorprende que el futbolista deje el Lokomotiv de Moscú, dado que su relación con el entrenador del equipo no es buena desde hace tiempo y se sabía que él quería cambiar de equipo.
Sus números de esta temporada no son espectaculares como otros años. Algo más de mil minutos entre Liga y Supercopa, quince partidos y cuatro goles. Pero no diría que es un jugador en decadencia, simplemente que no está pasando por su mejor momento, pero aún tiene cosas por dar y esta puede ser una buena oportunidad.
Es complicado decir si se adaptará bien a la Liga, especialmente al fichar por un equipo que ocupa puestos de descenso, que es una situación a la que él no está acostumbrado. Definitivamente, está ansioso por jugar y es muy luchador, eso sí que se lo va a ofrecer al Celta seguro.
En este mercado había habido algún rumor de que podía ir al Espanyol, pero se comprobó que era una noticia falsa. No hay gran demanda de jugadores rusos y en general ellos tampoco quieren moverse porque tienen salarios muy altos aquí. El caso de Smolov era diferente por la situación con el entrenador.
Alex Bobrov es periodista del medio ruso Sport-Express