El entrenador del Celta aspira a sorprender al Elche en un duelo entre dos equipos «necesitados»
05 ene 2023 . Actualizado a las 14:14 h.El entrenador del Celta, Carlos Carvalhal, ha comentado esta mañana, en la previa de la visita al Elche en el primer partido de liga del 2023, que espera la llegada de una incorporación en este mercado, dejando claro que es posible que se produzca. «Creo que hay posibilidad de fichaje y de manejar las cosas para intentar que se incorpore un jugador. Está en la mano de Luís (Campos) y confío mucho en él», subrayó el técnico.
En cualquier caso, también respondió afirmativamente a la pregunta de si hay equipo suficiente para salvarse en caso de que no se concrete ese ansiado fichaje.«Soy el entrenador de este equipo y acredito que con estos jugadores, vamos a ganar mañana. No está prevista ninguna revolución de salida y entrada de jugadores, confiamos en estos, que tienen que estar a la altura del Celta», ahondó.
Carvalhal admite que «los resultados están ahí y podrían ser mejores», si bien cree que «el proceso va bien». A la cuestión de si les está costando más de lo esperado, analizó: «A veces, se ganan partidos sin saber por qué; también al contrario. Contra Sevilla y Espanyol, merecimos mucho más de lo conseguido. Cerramos bien la portería, creamos oportunidades y, entonces, hablamos de pormenores de una falta de equilibrio pequeña, situaciones de gol que no concretamos».
No es ajeno el entrenador a que «el resultado condiciona todo», pero dejando claro que para ellos hay más cosas que les hacen ser optimistas. «Es importante también el proceso, y los jugadores siguen fielmente nuestras ideas. Estamos viendo la reproducción de lo que estamos trabajando. El proceso está muy bien». En cuanto al rival, el Elche, espera encontrarse enfrente «un Elche combinativo y bien organizado». «Nosotros tenemos que estar igual, sorprender al rival con alguna cuestión inesperada. Tenemos que cerrar bien la portería y va a ser un partido muy disputado, porque los dos necesitamos ganar».
Descarta por completo que este duelo del Martínez Valero sea una final. No lo considera así para ninguno de los dos conjuntos. «No es una final. Esto es un maratón y no se puede hablar de final. Después del partido, habrá vida para los dos, con muchos puntos y mucha competición por delante. No es a vida o muerte, eso no existe en el fútbol. Vida o muerte es Ucrania». Eso no quita para que admita que les gustaría tener más puntos y dé importancia a los de este compromiso: «Tenemos que pelear y buscar la felicidad. Mañana vamos a intentar traer los tres puntos».
En relación al estado del equipo, respondió tanto sobre el aspecto físico como sobre el mental. «Desde el punto de vista físico, vamos a tener un once para pelear los tres puntos sin excusas. Será un partido difícil entre dos equipos necesitados», comenzó. «En lo anímico, el equipo, en la prórroga, tenía una actitud competitiva y eso me alegra mucho. Los jugadores quieren ganar, están muy unidos y seguro que vamos a estar bien en este partido», señala el técnico del Celta sobre la visita al Elche.
Se le preguntó al máximo responsable del banquillo del Celta sobre la dificultad que está teniendo su equipo para cerrar los partidos. «Estamos consiguiendo lo más difícil. Con el Sevilla, el viento condicionó mucho nuestro juego. Tuvimos una clara oportunidad para el 2-0, son circunstancias del juego. Es importante saber cerrar la portería». Ya el pasado martes, ocurrió lo mismo, dijo: «Bajamos más de lo que nos gustaría hasta el 11, pero tuvimos nuestro momento y tuvimos la oportunidad de Larsen. Entre nuestro gol y el del Espanyol, bajamos las líneas más de lo que nos gustaría».
La presión «es siempre la misma». «Ahora tenemos otro partido con el que estamos ilusionados. Esa es nuestra responsabilidad». El duelo frente al Espanyol es el primero que siente que perdieron - dejando al margen su debut ante Osasuna-. «Pero perdimos cayendo de pie. Hicimos lo suficiente para ganar». Además, mostró su apoyo a Agustín Marchesín: «Tiene toda nuestra confianza y mañana queremos que toda la gente esté con una mentalidad fuerte».
Además, tras su enfado por el artbitraje frente al Espanyol, se le preguntó si le molesta que el club no se haya pronunciado públicamente sobre este asunto: «Mis principios son no hablar. Hace tres años, hice una excepción y hablé muy duro. Hay que respetar los canales del club. El club hace algo, pero no lo hace público».
