Mouriño asume la salida de Gabri pagando los 40 millones de cláusula

X. R. C. VIGO

GRADA DE RÍO

Oscar Vázquez

«No queremos venderlo, pero nos lo van a comprar», comenta el presidente del Celta, al que le consta el interés de varios equipos de la Premier pero no del Madrid

24 mar 2023 . Actualizado a las 20:58 h.

Los meses de Gabri Veiga en el Celta parecen estar contados y su futuro más allá del 30 de junio se dibuja lejos de Vigo. Carlos Mouriño, el presidente del club, es el primero en reconocerlo: «Nosotros no queremos vender a Gabri bajo ningún concepto, pero nos lo van a comprar», comentó en varias ocasiones durante su comparecencia de ayer.

Mouriño dejó claro que solo saldrá previo pago de la cláusula de 40 millones y desveló que al menos cuatro de los diez primeros equipos de la Premier han preguntado por él. De la liga española, negó que uno de los interesados que le constan sea el Madrid, aunque al tratarse del abono de la cláusula, el Celta no tiene nada que negociar. Dijo que alguna de las ofertas que conocen son imposibles de igualar por parte de la entidad celeste, lo que descarta que pueda jugar en Vigo en el año del centenario.

LA SITUACIÓN

Entre el deseo y la realidad de los números

El Celta quiere contar con Gabri Veiga en su proyecto de la temporada 23/24, pero asume que será imposible. «Nosotros no queremos vender a Gabri, pero nos lo van a cobrar y nosotros no podemos hacer nada», explicando las mareantes ofertas que tiene el porriñés sobre la mesa: «Nosotros conocemos algunas que ha tenido y sabemos que por mucho que quisiéramos, no tenemos capacidad para pagarle lo que le pagan otros equipos». Mouriño lo considera el gran activo del Celta y asume que no ven opciones de que se quede. «Sabemos que no lo vamos a poder retener. Nos engañaríamos si dijéramos que vemos posibilidades de que se quede».

PRECIO

Saldrá por la cláusula de 40 millones sin negociación

El equipo que se lleve a Gabri Veiga sabe que debe depositar los 40 millones de cláusula. «Tienen que pagar la cláusula; si no, no se vende. En este caso, el Celta no tiene nada que negociar, sino que serán el jugador quién debe decidirse entre las ofertas que tenga de los equipos dispuestos a dejarse 40 millones. «Si alguien nos llama preguntado por Gabri, el discurso es muy fácil: él decide a dónde quiere ir», manifestó. De concretarse, sería la venta más grande de la historia celeste.

PRETENDIENTES

Cuatro equipos de la Premier se interesaron y el Madrid no preguntó por él al Celta

El presidente Mouriño no reveló nombres de los equipos que quieren incorporar al porriñés a su próximo proyecto, pero dio alguna pista, y una de ellas apunta a la Premier «De los 10 primeros del fútbol inglés, a lo mejor llamaron cuatro», comentó, negando que uno de ellos sea el Newcastle, uno de los conjuntos que han sonado para llevarse al mediocentro. El Manchester City y el Liverpool también podrían estar tras la pista. Por otra parte, negó que le constase el interés del Real Madrid. «A nosotros el Madrid no nos ha preguntado en ningún momento por el jugador, no ha habido ni la más mínima gestión; no sé a él», indicó.

NEGOCIACIÓN

Sin posibilidad de aumentar la cláusula para cobrar más

El cambio de ficha del B al A posibilitó que la cláusula de Gabri Veiga pasara de 20 a 40 millones de euros, pero a partir de ahí, no hay posibilidad de aumentarla para que el club, que asume su marcha, pudiese cobrar más por el traspaso. «Va unido siempre a la posibilidad de un sueldo y con los sueldos que se está hablando que tiene en su mesa, no podemos competir con los grandes equipos que se nos lleven a los jugadores. Gabri nunca discutiría una cantidad alta en un juzgado, pero siempre está relacionado el sueldo con las cláusulas», apuntó el rector, que volvió a repetir la necesidad de tener siempre un equilibrio salarial en la plantilla.

EL JUGADOR

Un celtista de corazón con ofertas irrechazables

Mouriño quiso poner en valor el celtismo de Gabri más allá de su partida. Puso como ejemplo lo sucedido el pasado fin de semana: «Llegamos a las dos de la madrugada de jugar y al día siguiente, en el Celta B, estaba él, el de siempre, viendo el partido. Lo demuestra constantemente. Entendemos que lo que le ofrecen es irrechazable. Es ejemplo de que la cantera triunfa. Eso apoya a nuestra política».