Garcés y el propósito de «interpretar lo que significa el Celta para la gente y darles lo que quieren, llevarlo a la cancha»

LA VOZ VIGO

GRADA DE RÍO

Xoán Carlos Gil

El nuevo director de fútbol del Celta se ha «empapado» del club y de Galicia a través de documentales y lecturas de autores como Álvaro Cunqueiro, Alfonso Armada o Lucía Taboada

04 ene 2024 . Actualizado a las 22:19 h.

El nuevo director de fútbol del Celta, Marco Garcés, ha sido presentado este jueves en A Sede en un acto en el que ha estado acompañado por la presidenta del club, Marián Mouriño. «Me llena de ilusión y entusiasmo este emprendimiento. He estado en clubes cuya mayor virtud fue la posibilidad sacar jugadores de la cantera, cosa muy importante aquí», introdujo dejando claro que desde la entidad han sido «muy enfáticos» en reiterar la importancia de la base.

Sostiene que su «admiración en la distancia» por el club vigués viene de «lejos», también dado el seguimiento que en su país se ha hecho de La Liga desde los tiempos de Hugo Sánchez. Recordó el contacto que había tenido anteriormente. «Me tocó scoutear para el Manchester United, venir a jugar con Pachuca, estuvimos cerca de traer acá a Chucky Lozano», relató. «Me gusta lo que significa el Celta, la identidad que ha creado. Me he empapado para entender cada vez más lo que es el Celta», reveló.

En ese sentido, se detuvo a explicar que quiso leer para aproximarse a la cultura gallega. «Leí a Álvaro Cunqueiro, Alfonso Armada, Lucía Taboada, intentando interpretar lo que la gente quiere ver y lo que para la gente significa el Celta y así, poder interpretarlo de mejor manera y llevarlo a la cancha», expuso. «He visto documentales del Celta, tengo la canción de Mostovoi en la cabeza, sabemos que lo que quiere la gente» y buscarán perfiles para dárselo, agrega.

A continuación, se detuvo Garcés en sus dos grandes objetivos en el Celta, que son «alinear los distintos aspectos que constituyen el club para promocionar a los jugadores de la cantera para arriba de la mejor manera», por un lado. Por el otro, «fortalecer las redes de reclutamiento en el mundo para traer a los mejores jugadores que complementen a la cantera».

Quiso dejar claro que «todo lo que está en el Celta vale y todo lo que vale tienen que sumar. No puede haber áreas periféricas». Y anunció que se sumarán «cuatro analistas que interactuarán con los ojeadores, que se pasan a Afouteza. Son el corazón de un club porque deciden quiénes juegan», apunta. Calcula que habrá firmado 500 jugadores «y todos llegaron a través de un ojeador». Las nuevas incorporaciones se centrarán en generar una base de datos para un scouting masivo que se hace a través de datos por la imposibilidad de «poner gente en tierra en todas las partes del mundo».

En cuanto al perfil de jugadores, esbozó la idea con la que quiere trabajar, aunque sin dar muchos detalles. «Si tienes un jugador como Hugo Álvarez y junto con el comité técnico determinas que le falta un año para estar presto para la competencia, puedes traer a un jugador de 33-34 del que prescindas en un año, cuando el otro está listo». Se refirió a que «es importante tener una identidad competitiva que te permite producir lo que el mercado te marca. Necesitas un tipo de jugador que te permita estar compitiendo por las cosas, siempre apoyándote en la cantera y el mercado gallego, pero si no consigues genera algo, habrá que traerlo».

Además, en lo personal, Garcés comenta que una constante en las ligas donde ha estado es «que a quien preguntes, quiere venir a trabajar a España», algo que a él no le alcanzó como futbolista, pero sí como directivo ahora, una oportunidad que no podía rechazar. En el tiempo que lleva en Vigo, ha sentido la «sinergia con la gente, con los jugadores, con el staff», que califica de «significativa». «Eso se siente en el vestuario y en Afouteza, unidad», afirma. También contó que habló con los tres capitanes antes de llegar.

El nuevo responsable céltico también aludió a las similitudes entre mexicanos y gallegos. «Tengo una visión encantadora de Galicia. Tenemos en común estar acostumbrados a la dureza, a afrontar adversidades. También me gusta el orgullo patriótico que tienen. Son elementos para una identidad competitiva». Bromeó con que «el pimentón es mexicano y no le va mal al pulpo».