Los equipos de rescate buscan posibles víctimas del huracán «Ike» en Texas y Luisiana

EFE

INTERNACIONAL

Por ahora han sido rescatadas alrededor de 1.500 personas entre ambos estados.

15 sep 2008 . Actualizado a las 16:56 h.

Los equipos de rescate llevan a cabo este domingo una intensa búsqueda de posibles víctimas del huracán Ike, cuyo paso por Texas y Luisiana provocó la muerte de al menos cuatro personas. Mientras, las autoridades tratan de evaluar con precisión los daños materiales.

Hasta el momento han sido rescatadas casi un millar de personas en Texas, según la oficina del gobernador, Rick Perry, quien definió esta operación como la mayor de búsqueda y asistencia realizada en la historia del estado. Además, en Luisiana han sido atendidas unas 600 personas.

Se calcula que hasta 140.000 personas desoyeron las recomendaciones de las autoridades de evacuar y se quedaron en las áreas más afectadas por la gigantesca tormenta, en especial en la isla de Galveston, donde Ike tomó tierra. El alcalde de la localidad ha confirmado la muerte de tres personas por el paso del huracán.

Los equipos de rescate tratan de localizar a la mayor gente posible antes de que oscurezca y las posibles víctimas se vean obligadas a pasar una segunda noche a la intemperie o entre escombros.

Las tareas se ven obstaculizadas por los numerosos restos, vehículos y árboles derribados que se acumulan en la isla, así como la intensa lluvia que sigue cayendo sobre la zona y que amenaza con nuevas inundaciones.

Entre el agua y los escombros

En Houston, la cuarta ciudad del país y donde el huracán dejó sentir toda su fuerza, se ha declarado un toque de queda entre las 21.00 y las 06.00 hasta el próximo sábado.

Cerca de dos millones de personas se encuentran sin electricidad y no funcionan los semáforos ni el alumbrado nocturno. Asimismo, muchas calles se encuentran cortadas por inundaciones o escombros. 'Ike' arrancó cristales de los rascacielos, desprendió tejados y se llevó por delante paradas enteras de autobús.

Por otro lado, según el jefe de policía en Houston, Harold Hurtt, una treintena de personas han sido detenidas por pillaje.