La policía carga contra los antinucleares ante los bloqueos al convoy de residuos

EFE

INTERNACIONAL

Los antidisturbios usaron chorros de agua a presión y cargaron contra los centenares de manifestantes apostados sobre los raíles y alrededores.

10 nov 2008 . Actualizado a las 09:16 h.

La policía alemana cargó hoy repetidamente contra grupos de manifestantes antinucleares para disolver los bloqueos de la vía ferroviaria en la región de Dannenberg y abrir el paso al convoy de residuos destinado al cementerio atómico de Gorleben (norte de Alemania).

Los antidisturbios usaron chorros de agua a presión y cargaron contra los centenares de manifestantes apostados sobre los raíles y alrededores, para despejar los últimos 50 kilómetros del trayecto hasta Dannenberg, ciudad vecina al depósito.

El convoy partió el viernes de la planta de reprocesamiento de La Hague (Francia) con residuos procedentes de centrales alemanas y entró con más de doce horas de retraso por el sur de Alemania, la madrugada del sábado a domingo, a causa de repetidos bloqueos por parte de activistas antinucleares.

A lo largo del domingo, el tren, compuesto por once vagones, cruzó más de 1.000 kilómetros en dirección a Dannenberg, donde a lo largo del fin de semana se habían concentrado hasta 16.000 personas para protestar contra el transporte.

El tramo más complejo, sin embargo, son los 50 kilómetros finales hasta Dannenberg, aún por vía ferroviaria, tras los cuales se transportará el cargamento de los vagones a camiones en las que se trasladarán los residuos por carretera hasta el cementerio de Gorleben.

Se espera que este último tramo se complete entre esta noche y el lunes.

El paso del tren se vio obstaculizado ya ayer por tres activistas que obstaculizaron a las vías pegados a ellas con cemento, a lo que siguieron hoy sucesivas acciones de bloqueo, sentadas y otras formas de protesta.

Tras entrar este domingo en el estado de Baja Sajonia, donde se encuentra Gorleben, la policía realizó una contundente carga contra unos 700 activistas apostados sobre las vías, a lo que siguieron nuevos disturbios por los bosques adyacentes.

El convoy transporta 17 toneladas de residuos, vitrificados y herméticamente protegidos en los contenedores del tipo TN-85 de hasta un total de cien toneladas.

Se trata del primer transporte en dos años y la policía preparó un dispositivo de 16.000 agentes para proteger el convoy.

En el pasado, estos transportes generaron ya grandes movilizaciones y batallas campales contra la policía.

El propósito de la canciller Angela Merkel de revisar el plan de cierre de las plantas nucleares acordado por su predecesor, el socialdemócrata Gerhard Schröder, ha revitalizado las protestas.

La movilización de este fin de semana es la mayor registrada en Alemania desde 2001.