El Gobierno alemán defiende retrasar hasta los 67 años la edad de jubilación

EFE

INTERNACIONAL

Considera que es una medida de «justicia» para con las generaciones futuras.

17 nov 2010 . Actualizado a las 13:14 h.

La ministra de Trabajo alemana, Ursula von der Leyen, defendió hoy la medida gubernamental de retrasar la edad de jubilación hasta los 67 años, argumentando que es una medida de «justicia» para con las generaciones futuras.

En una entrevista en la cadena de televisión pública ZDF, la titular de Trabajo respondió a las recientes críticas sobre el retraso progresivo del final de la vida laboral a partir de 2012, una reforma introducida por el último Gobierno de Gerhard Schröder.

«Se trata de compartir las cargas derivadas del aumento de la esperanza de vida», justificó Von der Leyen, ya que, si se vive cada vez más, «entonces se puede trabajar también un poco más tiempo».

A su juicio, las personas mayores son los «ganadores del mercado de trabajo», ya que en los últimos años la tasa de empleados mayores se ha duplicado.

Las declaraciones de Von der Leyen, recién elegida miembro de la dirección de la Unión Cristianodemócrata (CDU), tuvieron lugar poco antes de que el Gobierno federal aprobase el informe anual del Ministerio de Trabajo sobre los trabajadores mayores y la situación de sistema de pensiones.

Según este documento, las pensiones podrían elevarse en Alemania hasta un 29 por ciento para 2024 si continúa la tendencia económica positiva.

La patronal alemana, al igual que Von der Leyen, se ha mostrado a favor de mantener el retraso de la edad de jubilación hasta los 67 años, argumentando que, en caso contrario, la carga del desarrollo demográfico iría progresivamente lastrando a los contribuyentes de las próximas generaciones.

Por su parte, los sindicatos han propuesto recientemente elevar las cuotas de las pensiones en un 0,6 por ciento, repartidas a partes iguales entre trabajadores y empresas, para no tener que prolongar la vida laboral en Alemania.

Los representantes de los trabajadores apuntaron que esta medida dificultaría la inserción en el mercado laboral de los desempleados y propusieron «congelarla».