El 57% de los franceses creen que Strauss-Kahn es víctima de un complot

Esperanza suárez PARÍS / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

19 may 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

La conmoción que ha supuesto para los franceses la detención de Dominique Strauss-Kahn se traduce ya en las encuestas: un 57% de los ciudadanos consultados por el Instituto CSA opinan que el director general del Fondo Monetario Internacional (FMI) es víctima de un complot. El porcentaje sube hasta el 70% entre los simpatizantes socialistas.

Los sociólogos del instituto interpretan esta reacción como una «forma de autodefensa colectiva» fruto del «sentimiento generalizado de incredulidad». Las audiencias de los telediarios han aumentado de forma espectacular desde el domingo. Los medios de comunicación hacen examen de conciencia, tanto por la pertinencia de la publicación de las imágenes de Strauss-Kahn esposado como por los reproches que les dirigen sus colegas anglosajones.

Orgullo nacional herido

El orgullo nacional está en juego. Un periódico australiano afirma que «cuando se trata de sexo, mentiras y política los franceses y nosotros los anglosajones venimos de planetas diferentes». De «virulento» califican los medios franceses el editorial del británico Daily Mail: «Si Strauss-Kahn fuera un potencial dirigente británico o americano, sus apetitos sexuales aparentemente pantagruélicos se habrían hecho públicos y se habrían comentado en los medios».

El prestigio internacional de Francia ha salido lastimado. La encuesta del CSA no entra en el posible origen de la conspiración, pero casi un tercio de los encuestados coincide en que el gran beneficiado por el escándalo es el presidente Nicolas Sarkozy y los resultados del sondeo revelan que solo François Hollande, anterior secretario general del Partido Socialista, es capaz de sacarle un punto de ventaja en la primera vuelta. Martine Aubry empataría, y Ségolène Royal quedaría a cinco puntos del actual presidente.

Los centristas y la ultraderecha sacan también partido de la caída del hasta ahora absoluto favorito. Marine Le Pen confirma su 20% de intención de voto, y el Modem de Bayrou comparte un ascenso de ocho puntos con el Partido Radical de Borloo.

El diario conservador Le Figaro publicó ayer otro sondeo que proclama a Hollande como nuevo favorito indiscutible de las primarias socialistas que se celebrarán a primeros de octubre. Le dan un 62% de posibilidades de conseguir la nominación de su partido, frente a un 22 de su sucesora Aubry, y mucha ventaja sobre su ex pareja y candidata en el 2007, Ségolène Royal. No obtendrían mucho más éxito los otros dos posibles aspirantes que aún no se han pronunciado, el ex primer ministro Laurent Fabius y el alcalde de París Bertrand Delanoë.

De lo que no cabe duda es de que las del 9 de octubre serán unas auténticas primarias, completamente abiertas, con el peligro de que vuelva a estallar una batalla de egos. Huérfano de líder, el influyente sector próximo a Strauss-Kahn puede dividirse.