Los acusados negaron los hechos ante Gómez Bermúdez alegando que en ningún momento tuvieron intención de abordar el barco español
03 nov 2012 . Actualizado a las 07:00 h.El juez de la Audiencia Nacional Javier Gómez Bermúdez decretó ayer prisión incondicional para los seis supuestos piratas somalíes acusados de atacar el atunero vasco Izurdia. Tras tomarles declaración, el magistrado ha imputado a los somalíes un delito de piratería.
Los acusados negaron los hechos ante Gómez Bermúdez alegando que en ningún momento tuvieron intención de abordar el barco español, sino que se aproximaron a él mientras buscaban a un compañero que se había caído al agua. El juez, sin embargo, no dio credibilidad a esta versión ya que el encuentro con el navío español se produjo a 290 millas de la costa.
Los hechos se remontan al 10 de octubre, cuando el Izurdia alertó a los efectivos de la operación Atalanta sobre un intento de ataque por parte de un esquife.
La embarcación en la que viajaban los detenidos desistió en su acercamiento al pesquero después de que la seguridad privada que llevaba a bordo el atunero realizase varios disparos de advertencia. Al día siguiente, el esquife fue interceptado por una fragata de la Armada holandesa, encuadrada en la OTAN, y sus tripulantes entregados al buque militar español Castilla. Según testificaron los militares holandeses que procedieron a su arresto, los somalíes arrojaron sus armas al mar antes de ser detenidos, entre ellas un lanzagranadas.
Esta es la tercera ocasión en que la Audiencia Nacional juzga un ataque de piratas a un pesquero español en el Índico. Anteriormente, dos piratas fueron condenados en mayo del 2011 a 439 años de cárcel por su relación con el secuestro del Alakrana, aunque en diciembre el Tribunal Supremo rebajó en 36 años las penas impuestas a Cabdiweli Cabdullahi, Abdu Willy, y a Raageggesey Hassan Aji para dejarlas en 403.
El juez Eloy Velasco está instruyendo a su vez el proceso contra otros seis somalíes acusados de intentar asaltar el buque de la Armada Patiño. Por esta causa procesó a seis supuestos piratas por 218 delitos de detención ilegal, uno de piratería en grado de tentativa, otro de desobediencia a buque militar para prevenir la piratería, una falta de daños y pertenencia a organización criminal con la agravante de elevado número de componentes y tenencia de armas.
Las penas con las que estos delitos están castigados van de los 893 años y tres meses de prisión hasta los 1.122 años y medio de cárcel.