Al Asad tiene garantizada una amplia victoria en la elección presidencial
04 jun 2014 . Actualizado a las 21:22 h.El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, que realiza una visita a Beirut, aseguró este miércoles que los comicios presidenciales celebrados este martes en Siria «no son elecciones», porque millones de ciudadanos no pudieron votar debido al conflicto. «No son elecciones, no tienen sentido porque no pueden celebrarse cuando millones de sus habitantes no están capacitados para votar», dijo Kerry en una conferencia de prensa al término de una reunión con el primer ministro libanés, Tamam Salam.
Además, John Kerry instó a Rusia, Irán y al grupo chií libanés Hizbulá a «desplegar esfuerzos para poner fin a la guerra (en Siria)». «El conflicto sigue igual, así como el terror y la muerte», señaló también el dirigente norteamericano, que calificó el conflicto de «demostración grotesca de una guerra moderna de un Estado contra su propio pueblo».
El secretario de Estado de Estados Unidos se encuentra en el Líbano en una visita fugaz, donde tiene previsto reunirse, además de con el primer ministro, con el presidente del Parlamento, Nabih Berri, y el patriarca maronita, Bechara Rai, según los medios libaneses
Amplia victoria de Al Asad
Siria celebró el martes comicios presidenciales a los que se ha postulado el presidente sirio, Bachar al Asad, junto al diputado de la oposición tolerada Maher Abdel Hafez Hayar y el exministro Hasan Abdalá al Nuri. Aunque los resultados definitivos se darán a conocer en principio el jueves por la noche, con toda probabilidad, Al Asad, en el poder desde 2000, será reelegido para un tercer mandato de siete años.
La votación se desarrolló únicamente en las zonas bajo control de las autoridades, mientras proseguían los combates y las operaciones militares, que han causado más de 150.000 muertos, 6,5 millones de desplazados internos y 2,5 de refugiados.
Según Al Watan, cercano al poder, la tasa de participación se sitúa entre el 70 y el 80% en siete de las 14 gobernaciones del país. «El candidato Bashar al Asad se dirige hacia la victoria (...) dado el importante número de personas que votaron (por él)», afirmó el diario. «Millones de sirios han acudido a votar desafiando el terrorismo y los coches bomba para afirmar la legalidad de un nuevo mandato de Bashar al Asad que durará hasta 2021», escribió también Al Watan. «Los colegios electorales han sido tomados por asalto. Esto refleja el alto grado de responsabilidad hacia los desafíos de la guerra terrorista contra la que deben luchan en Siria», afirmó por su parte el diario oficial As Saura.
Los periodistas de AFP también observaron una participación importante y la votación se prolongó cinco horas «debido a la afluencia de electores», según las autoridades. Sin embargo, las calles estaban casi desiertas en Damasco el día de la elección, debido a la caída de numerosos obuses disparados por los rebeldes. «Más de 130 obuses de morteros cayeron el martes sobre Damasco y sus alrededores en manos del régimen», matando a tres personas, indicó el director del Observatorio Sirio de Derechos del Hombre (OSDH), Rami Abdel Rhamane. En Alepo, en las zonas bajo control del régimen, los muertos fueron 19.