Washington contará con una embajada en La Habana y flexibilizará las restricciones sobre el comercio y los viajes a la isla; Obama y Raúl Castro comparecieron a la misma hora para reforzar la idea del acercamiento
17 dic 2014 . Actualizado a las 20:58 h.Jornada histórica. Tras medio siglo de bloqueo, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha ordenado el inicio inmediato de un diálogo con Cuba para restablecer las relaciones diplomáticas entre ambos países, rotas desde 1961. Estados Unidos contará en poco tiempo con una embajada oficial en La Habana.
El acercamiento entre ambos países arrancó hace año y medio en unos encuentros secretos coordinados por Canadá y que contaron con el impulso del papa Francisco (que envió cartas a los máximos mandatarios de cada país, que tuvieron un encuentro final en el Vaticano). Obama y Castro acordaron esta misma semana en una conversación telefónica de una hora restablecer las relaciones diplomáticas. Washington flexibilizará las restricciones sobre el comercio y los viajes a la isla, y Obama aseguró que trasladará al Congreso la suspensión del embargo económico unilateral impuesto sobre la isla caribeña en 1962 por el presidente Kennedy y que fue mantenido por todos sus sucesores hasta la fecha.
En una comparecencia desde la Casa Blanca, Obama anunció el «fin» de una política «obsoleta» y que «ha fracasado durante décadas». Obama apuesta por «una Cuba más libre y próspera», al tender «un mano de amistad» al pueblo cubano al anunciar desde la Casa Blanca el inicio de un nuevo capítulo en las relaciones con La Habana. El presidente de Estados Unidos pidió al Congreso de su país que inicie un debate «honesto» y «serio» sobre la suspensión del embargo económico unilateral sobre Cuba decretado por Washington en 1962. Obama terminó su discurso con una frase en español del cubano José Martí, creador del Partido Revolucionario Cubano: «Todos somos americanos».
«No espero que los cambios que estoy anunciando hoy provoquen una transformación de la sociedad cubana de la noche a la mañana», señaló Obama. No obstante, defendió que una «política de compromiso» con la isla puede ser mucho más eficaz que el «aislamiento» y que «no sirve a los intereses de Estados Unidos» tratar de «empujar a Cuba hacia el colapso».
John Kerry informó posteriormente en una nota que la subsecretaria para el Hemisferio Occidental (América Latina y el Caribe), Roberta Jacobson, viajará en enero a Cuba para iniciar las discusiones. «Espero ser el primer Secretario de Estado en visitar Cuba en más de 60 años», manifestó. En abril, Obama acudirá a la Cumbre de las Américas en Panamá, donde coincidirá con Raúl Castro.
Castro, a la misma hora
El presidente cubano, en un gesto que viene a confirmar la nueva sintonía, compareció a la misma hora. Raúl Castro aclaró que, aunque se ha decidido avanzar en la normalización de las relaciones entre los dos países, «esto no quiere decir que lo principal se haya resuelto» y exigió el fin del «bloqueo económico, comercial y financiero que provoca enormes daños humanos y económicos». «Aunque las medidas del bloqueo han sido convertidas en Ley, el presidente de los Estados Unidos puede modificar su aplicación en uso de sus facultades ejecutivas», recordó Castro.
El presidente cubano admitió que persisten profundas diferencias entre los dos países, «fundamentalmente en materia de soberanía nacional, democracia, derechos humanos y política exterior», pero reafirmó la «voluntad» del Gobierno de Cuba a dialogar sobre todos esos temas. «Proponemos al Gobierno de los Estados Unidos adoptar medidas mutuas para mejorar el clima bilateral y avanzar hacia la normalización de los vínculos entre nuestros países», añadió Castro.
Como prueba inequívoca del acercamiento, este mismo miércoles el Gobierno de Barack Obama ha puesto en libertad a tres espías cubanos del llamado grupo de Los Cinco que cumplían condena en el país, a cambio de la liberación de Alan Gross, un oficial de inteligencia estadounidense que llevaba casi 20 años preso en Cuba, según informaron altos funcionarios del país.
Obama no tiene planes concretos de viajar a Cuba de forma inminente, pero no descarta visitar la isla antes de abandonar la Casa Blanca, ahora que los dos países han acordado reanudar sus relaciones diplomáticas más de medio siglo después de la imposición del bloqueo. El portavoz de la Casa Blanca ha asegurado que Obama confía en que la Cámara de Representantes y el Senado puedan adoptar medidas que permitan levantar por completo el embargo impuesto en 1961 antes de que concluya su mandato (enero del 2017).Josh Earnest ha advertido, no obstante, de que los sucesores de Obama podrían dar marcha atrás al cambio de políticas anunciado este miércoles tras la excarcelación del contratista estadounidense Alan Gross.