La investigación se suspende por falta de colaboración de EE.UU. y, por tanto, falta de pruebas
13 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El escándalo por las escuchas a uno de los teléfonos móviles de Angela Merkel no será resuelto. La Fiscalía federal alemana suspendió ayer por falta de pruebas la investigación sobre el espionaje sufrido por la canciller germana.
Aunque existen indicios indiscutibles de la operación para interferir las comunicaciones de Merkel, la falta de colaboración por parte de EE.UU. para resolver la investigación hacen que esta no pueda concluirse con éxito. Medios alemanes revelaron en octubre del 2013 que el móvil no encriptado que la canciller utilizaba como presidenta de la CDU había sido intervenido por la NSA estadounidense. Merkel telefoneó entonces a Barack Obama, a quien comentó enojada que «entre amigos no se espía». Obama aseguró que algo así no volvería a suceder.
El anuncio de la Fiscalía federal no es ninguna sorpresa. Su máximo responsable, Harald Range, se mostró ya el pasado diciembre muy escéptico sobre las posibilidades de éxito de su investigación durante la rueda de prensa anual de su oficina. «Las acusaciones no pueden demostrarse judicialmente con los medios del derecho penal», señaló ayer la Fiscalía en un comunicado.
La decisión es un alivio para Angela Merkel, que no tiene interés alguno en llevar a los tribunales a los servicios secretos de un país amigo y su principal aliado trasatlántico.