Introduce una cuña en el dominio de la izquierda sobre Latinoamérica
29 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La derecha latinoamericana, y muy particularmente la venezolana, celebró con esperanza la victoria de Mauricio Macri en las elecciones presidenciales de Argentina. Si el empresario argentino logra cumplir lo que prometió en su campaña se reconfiguraría el mapa político de América Latina. Tras el triunfo de Hugo Chávez en 1998, el «rojo, rojito» se fue extendiendo especialmente por el sur del continente, color que podría comenzar un ciclo de declive. «¿Se puede o no se puede? ¡Sí se puede Venezuela! #InicioElCambio», escribió Lilian Tintori desde Buenos Aires la misma noche electoral.
El resultado que derrotó a Cristina Fernández es una inspiración para los antichavistas que llevan l7 años intentando derrocar «la revolución bolivariana del Siglo XXI» fundada por el fallecido Chávez. Con la llegada del empresario neoliberal a la Casa Rosada, Estados Unidos ganará un importante aliado que aunará fuerzas con Juan Manuel Santos, hasta ahora el único conservador entre una mayoría de Gobiernos de izquierdas como los de Venezuela, Bolivia, Nicaragua, Brasil, Ecuador, Chile y Cuba. Se supone que Washington, Bogotá y Buenos Aires empujarán la consolidación de la Alianza del Pacífico y el debilitamiento de los procesos más bolivarianos, como los liderados por Maduro y Morales.
Sin embargo, en el tema de los procesos de paz el nuevo jefe de Estado podría alinearse con el expresidente Álvaro Uribe, quien airea con mucho ruido su oposición al diálogo establecido hace tres años en La Habana con la guerrilla de las FARC y el arranque de las conversaciones con el Ejército de Liberación Nacional en Ecuador. Este punto podría ser causa de fricción con Santos, quien ha puesto todo su capital político en negociar la paz, aunque deba hacer concesiones como indultar guerrilleros, algo que parte de la sociedad rechaza.
La oposición antichavista cantó la victoria de Macri como propia. Tintori, la esposa del encarcelado Leopoldo López, fue una de las invitadas especiales que le acompañó en la celebración de su elección. La noche del domingo 22, en cuanto se confirmaron los resultados favorables, Tintori escribió en Twitter: «Hoy venció la esperanza en Latinoamérica y su próximo destino es nuestra amada Venezuela!». También otros dirigentes opositores destacaron que el triunfo de Mauricio Macri viene a reconfigurar el mapa político de América Latina y a redefinir las relaciones de Venezuela con el resto del hemisferio».
El primer país que visitará Macri para intentar aislar al chavismo es Brasil. Espera convencer a Dilma Roussef para que «revea» su posición sobre Venezuela, «pues para mí está más que claro que no respeta la democracia». Gerardo Szalkowicz, periodista y editor de la sección Internacional del portal Marcha Noticias argentino, señaló que «Macri significa una incorporación estrella al equipo que comanda la restauración conservadora en América Latina bajo la tutela estadounidense, que tiene como punta de lanza a la Alianza del Pacífico». El informador agrega que «para los sectores progresistas o de izquierda, el triunfo de la derecha en Argentina es muy mala noticia. Si bien el Gobierno kirchnerista proponía a un candidato conservador, para aquellas organizaciones que tienen en su acervo el impulso a la integración regional, este resultado golpea a todo el continente».
Pero una cosa son las intenciones y otra la realidad. De momento, la reconquista antibolivariana tuvo un tropezón en Uruguay. Su canciller Rodolfo Nin Novoa, desafió: «Vamos a ver si se concreta. Lo estudiaremos en su momento. Me parece que en Venezuela estamos lejos de una alteración en el orden democrático». El uruguayo no es el único que espera al veredicto de las urnas el domingo que viene para ver cómo actuar.