Putin visita Kirguistán su primer viaje al extranjero desde que el tribunal de La Haya solicitase su arresto
INTERNACIONAL

-El presidente ruso se desplazó a la república exsoviética sin problemas dado que el Parlamento kirguís no suscribió el Estatuto de Roma establecido para el funcionamiento de la Corte Penal Internacional
12 oct 2023 . Actualizado a las 21:47 h.El presidente ruso, Vladimir Putin, fue recibido este jueves en Bishkek, la capital de Kirguistán, con todos los honores a donde acudió en su primer viaje al extranjero desde que en marzo pasado la Corte Penal Internacional de La Haya (CPI) solicitase a nivel internacional su arresto por la deportación a Rusia de niños ucranianos. Putin mantuvo un encuentro con su homólogo kirguís, Sadir Zhapárov, y participó en las celebraciones con motivo del 20 aniversario del despliegue en este país centroasiático de la base aérea rusa de Kant. Según el servicio de prensa del Kremlin, los dos dirigentes abordaron las vías para «fortalecer la cooperación bilateral», incluyendo la militar en el marco de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (ODKB en sus siglas en ruso).
A pesar de que Kirguistán suscribió el Estatuto de Roma, establecido por el CPI en 1998 para que los firmantes se comprometan a detener y enviar a La Haya a los buscados por crímenes de guerra o de lesa humanidad, Putin ha podido viajar a este país sin miedo, ya que el Parlamento kirguís no ha ratificado el estatuto. Sí lo ha hecho, sin embargo, Armenia, lo que ha provocado duras críticas de Moscú. El estar buscado por la CPI impidió al jefe del Kremlin asistir a la cumbre de los BRICS en Sudáfrica y al G20 en la India.

Antiguas repúblicas soviéticas Kirguistán preside este año la Comunidad de Estados Independientes (CEI), grupo de países creado con las antiguas repúblicas soviéticas tras la desintegración de la URSS, salvo Estonia, Letonia y Lituania. Ucrania dejó de pertenecer a la CEI mientras que Moldavia y Georgia tampoco acuden. Putin subrayó que «Rusia es uno de los principales socios comerciales y económicos de Kirguistán y el mayor inversor en la actualidad». El primer mandatario ruso entregó a Zhapárov la Orden de Honor y luego firmaron varios documentos.
Estados Unidos impuso sanciones en julio a cuatro empresas de Kirguistán por reexportar componentes electrónicos y otras tecnologías a Rusia. Por eso, la semana pasada, el Banco Central de Kirguistán instó a los bancos locales a reforzar los controles para garantizar el cumplimiento de las sanciones occidentales contra Rusia.
En Bishkek, Putin se reunió también con el presidente azerbaiyano, Ilham Alíyev, para discutir la situación en Nagorno Karabaj después del éxodo masivo de los habitantes del enclave hacia Armenia y, en especial, el papel futuro de las tropas de paz rusas, cuya presencia ya no es necesaria, aunque Moscú considera que todavía podrían ser útiles. Se da la circunstancia de que el primer ministro armenio, Nikol Pashinián, cuyas relaciones con Moscú son cada vez más tensas, no ha viajado a Kirguistán. Este viernes, el primer mandatario ruso tiene también previsto un encuentro con el presidente de Tayikistán, Emomali Rajmón, y participará finalmente en una reunión del Consejo de Jefes de Estado de la CEI, entre ellos también los de Bielorrusia, Kazajistán, Turkmenistán y Uzbekistán. La CEI tratará así de adoptar una posición conjunta en relación con conflicto palestino-israelí. Previa a este cónclave, se reunieron los ministros de Exteriores de la CEI, algunos de los cuales se pronunciaron por un alto el fuego y el inicio inmediato de negociaciones. Por otro lado, el jefe de la Diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, deploró que «la OTAN está tratando de hacer valer sus intereses en el Cáucaso Sur a través de Armenia».
Putin tiene en su agenda viajar a China la semana que viene para entrevistarse con su aliado el presidente Xi Jinping, que le ha invitado al Foro económico «Un cinturón, una ruta», evento que celebra este año su tercera edición. Tampoco en China el presidente ruso tendrá el peligro de ser arrestado y enviado a La Haya, ya que Pekín, nunca se integró en el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional.