La Subdelegación justifica los controles de uva foránea por la necesidad de preservar el prestigio de la denominación
22 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Ribeira Sacra inicia oficialmente la vendimia. Desde hoy no es preciso solicitar autorizaciones especiales para poder recoger la uva. El consejo regulador entiende, una vez valorados los muestreos, que a estas alturas la cosecha está en condiciones de entrar en las bodegas. Se trata, no obstante, de una recomendación con carácter general. Bodegas y viticultores pueden elegir entre ponerse manos a la obra o esperar a que el grado alcohólico suba algo más. El riesgo de lluvias no está descartado para el fin de semana, pero de momento el sol se alía con los ribereños.
La meteorología, por una vez, no acapara todo el protagonismo en tiempo de vendimia. Lo comparte este año con la incertidumbre sobre la producción que certificará el consejo regulador. Los responsables de la denominación se darían por satisfechos con cinco millones de kilos de uva, lo que supondría un descenso de 1.194.000 kilos con respecto a la campaña anterior. Pero a los 400.000 kilos que se perdieron en Doade por el pedrisco le hay que añadir una merma de difícil cuantificación motivada por los ataques de mildiu que afectaron a la mayoría de las zonas.
El consejo regulador quiere que todo vaya por el libro y ha notificado a los viticultores de Doade que tendrán que comunicar la fecha de las vendimias para que sean supervisadas por los técnicos de la denominación de origen. También la Guardia Civil se implicará ese año de forma especial para evitar malas tentaciones. La Subdelegación del Gobierno confirmó ayer oficialmente que se han impartido «instrucciones concretas» para vigilar la entrada de uva foránea. Con este tipo de controles se busca, según precisa, «prevenir el fraude y proteger la competencia leal y el prestigio de la denominación de origen».
Solo en vino de mesa
El objetivo de esta vigilancia será verificar el destino de las partidas procedentes de viñedos de otras zonas. Las bodegas que elaboran vino de mesa pueden utilizar uvas de la procedencia que consideren oportuna. Pero a las marcas amparadas por una denominación de origen solo se puede destinar uva procedente de ese ámbito geográfico y de parcelas controladas por los consejos reguladores.
«Las bodegas pertenecientes a denominaciones de origen no tienen permitido mezclar ninguna cantidad de uva foránea», recalca la Subdelegación del Gobierno, que podrá en conocimiento de los servicios de la Consellería de Medio Rural las posibles infracciones.
Doce bodegas abiertas
De momento, los datos provisionales corroboran que se trata de una vendimia de maduración tardía con respecto a las inmediatamente anteriores. Por estas fechas, el año pasado se habían vendimiado en torno a los dos millones de kilos. Con fecha de ayer, el consejo regulador había contabilizado 115.165. Del total, 69.047 son de la variedad tinta mencía. Entre las uvas blancas, destaca el godello, con 21.617 kilos recogidos. En vísperas del inicio oficial de la vendimia, estaban abiertas doce de las 92 bodegas inscritas.