Solo la Diputación de Lugo estudia ayudas «moi puntuais» tras la reunión de Monforte
03 jun 2024 . Actualizado a las 20:36 h.No existen precedentes desde la puesta en marcha de la actual denominación de origen —y hace de ello treinta años— de una convocatoria como la del pasado 21 de mayo en el Centro do Viño da Ribeira Sacra. El presidente del consejo regulador, Antonio Lombardía, reunió a responsables de los 21 ayuntamientos de Lugo y Ourense integrados en la denominación de origen y de las respectivas diputaciones. Con una solicitud de destilación de crisis pendiente de autorización por Bruselas, Lombardía quiso abrir un debate conjunto sobre el futuro del sector. Pese a las buenas palabras de los representantes políticos, nadie parece dispuesto a implicarse económicamente para contribuir a la preservación de una viticultura singular que ha espoleado el despegue turístico de la zona.
Por el momento, solo la Diputación de Lugo se muestra proclive a aflojar la cartera. Y será, en todo caso, de forma bastante comedida. El alcalde de Monforte y presidente de ese organismo provincial, José Tomé lo avanzó en el último pleno municipal. «Teño previsto reunirme —señala— co presidente de consello regulador. É posible que desde a Deputación haxa algún tipo de axudas, pero cousas moi puntuais. Nin temos a capacidade económica nin nos correspondería facelo. Hai que pedir as cousas a quen as pode facer».
Por motivos de agenda, Tomé no pudo estar presente en la reunión celebrada en la sede del consejo regulador. Pero fue informado ese mismo día del contenido del encuentro por Pilar García Porto y Gloria Prada, que acudieron respectivamente en representación de la Diputación de Lugo y del Ayuntamiento de Monforte. La Diputación de Ourense, por su parte, envió de portavoz al diputado y alcalde de A Peroxa Manuel Seoane.
También tienen problemas
Tomé desveló en el último pleno una conversación telefónica previa a la reunión de Monforte con el titular de la Diputación de Ourense, Luis Menor. En esta charla su homólogo ourensano le habría trasladado la complejidad que entrañaría en su caso una hipotética concesión de ayudas directas a los viticultores de Ribeira Sacra, ya que a Ourense pertenecen también las denominaciones de origen vitícolas Ribeiro, Valdeorras y Monterrei.
«Non teñen socalcos, pero seguro que tamén atopan os seus problemas», apunta el presidente de la Diputación de Lugo. «Temos —añade— moitos sectores económicos na provincia. Hai empresas doutro tipo que pechan. No caso do concello a mellor colaboración posible é o Festival do Viño, que supón unha promoción tremenda. Se hai que agardar que as solucións cheguen dos concellos e das deputacións, non sei para que temos á Xunta».
Solo el alcalde de Sober, Luis Fernández Guitián, mostró hasta la fecha su disposición a conceder subvenciones municipales de hasta 100 euros por hectárea para los titulares de viñedos en bancales, en vista de los problemas que puedan surgir esta vendimia por el vino almacenado en las bodegas y la escasa demanda de uva. Se trata, no obstante, de una declaración de intenciones que todavía no se tradujo en un acuerdo firme. Si se desbloquease la concesión de ayudas directas con cargo a la PAC en el ámbito del paisaje cultural, Sober no mantendría una línea propia de incentivos debido a sus limitaciones presupuestarias.
En el último pleno que tuvo lugar en Monforte, el alcalde cuestionó la utilidad de las ayudas municipales. «¿Que dean en Sober 100 euros por hectárea vaille arranxar algo a algún viticultor?», se preguntó Tomé.
La reunión en la sede del consejo regulador fue el jueves 21 de mayo y el lunes siguiente se debatió en el pleno de la corporación de Monforte una propuesta del PP para que se habilitase una partida de 5.000 euros para ayudas a viñedos en bancales de este municipio. Ningún otro grupo la apoyó. PSOE, BNG y Esperta Monforte argumentaron que apoyarla sería asumir una competencia impropia. «Ribeira Sacra carece de una línea de ayudas específica como en Canarias. La Xunta tiene las competencias y la capacidad económica para abordar el problema», dijo el portavoz de los socialistas, Iván Torres.
«Entrar na dinámica das axudas municipais parece pouco aconsellable porque non todos os concellos poden destinar os mesmos cartos a elas», afirmó, por otro lado, el concejal del BNG Emilio Sánchez. Desde su punto de vista, de concederse incentivos deberían llegar también a viñas en bancales no inscritas en el consejo regulador y de parroquias como Moreda o Seoane —incluidas en la denominación— que sin estar en ribera pueden sufrir los problemas de la falta de mercado para la uva.
Riesgo de abandono
Iván Vázquez, el concejal del PP que defendió la propuesta, hizo hincapié en que el Ayuntamiento debería aportar «o seu grao de area» en un momento «de certo risco de abandono do cultivo tradicional en socalcos». Dentro de las filas populares, sin embargo, cargos como el alcalde de Pantón, José Luis Álvarez, se mostraron públicamente reticentes a esa fórmula e indicaron que por capacidad económica la Xunta y las diputaciones deben conceder las ayudas al viñedo.