Santiorxo, en el techo de la Ribeira Sacra

C. Rueda / F. Albo MONFORTE

SOBER

A nueve kilómetros de Sober se encuentra uno de los miradores más espectaculares del Cañón del Sil Las grandes paredes de roca alcanzan alturas de más de 500 metros en la zona

03 sep 2002 . Actualizado a las 07:00 h.

El mirador de Santiorxo, fácilmente accesible desde Sober, se encuentra en una de las zonas más escarpadas del Cañón del Sil, al igual que el de Cadeiras. En esta parte del cauce, las grandes paredes de roca caen prácticamente en vertical hasta la orilla del río, llegando a alcanzar las mayores alturas de la Ribeira Sacra, que superan los 500 metros. En la vertiente opuesta, perteneciente a la provincia de Ourense, también se hace evidente lo abrupto del terreno, con pendientes extremas y paredes totalmente inaccesibles. Se trata sin duda de un tramo bien representativo de lo que Ramón Otero Pedrayo llamó el paisaje heroico del Sil. Las espectaculares vistas del cañón que ofrece el mirador, no obstante, son contrarrestadas en parte por un bosque de pinos situado casi por debajo de él, que reduce un tanto la visibilidad. A la izquierda, casi rayando el horizonte, puede divisarse el mirador de Cadeiras y el campanario de de su iglesia. Del mirador parte a la derecha un sendero que enlaza con un antiguo camino, el cual daba acceso a viñedos y fincas hoy abandonados. Es aconsejable recorrer este camino unos metros y a continuación bajar monte a través -por varios senderos marcados- hasta un roquedal que hace las veces de mirador natural. Desde este punto se dominan nuevas vistas panorámicas del Sil y de la ribera de Somoza, a la derecha, además de los pueblos de Somoza, Hortos, Arriba y Barantes, que forman en su conjunto una excelente estampa paisajística. El pequeño pueblo de Santiorxo, por otra parte, aún conserva en buenas condiciones sus viviendas. La piedra de la zona, el elemento básico de su arquitectura tradicional, ha sido empleada para construir recios y fuertes muros. En la localidad todavía se conserva una antigua fragua en buen estado, que dejó de funcionar hace varios años. En las proximidades de Santiorxo se encuentra el pueblo de Paradela, atravesado por el arroyo de Algueira. En su parte baja, ya en la ribera y próximo a su desembocadura, hay varios molinos que hoy resultan inaccesibles debido a la gran cantidad de maleza que ha ido invadiendo la zona.