La Guardia Civil cortó ayer por la mañana la A-6, a la altura de Outeiro de Rei, para realizar controles rutinarios de vehículos, y el operativo provocó retenciones kilométricas por momentos. El corte duró alrededor de media hora, entre las 10.30 y las 11.00 horas de ayer. Fueron más de una docenas de agentes los que llevaron a cabo el dispositivo.
Los guardias cortaron los carriles de la autovía en dirección a A Coruña y comenzaron entonces a registrar a fondo varios turismos. La mayoría de los vehículos a los que pararon para inspeccionarlos eran de alta gama y conducidos por gente joven.
Esta operación provocó por momentos retenciones de varios kilómetros en la autovía, que llegaron desde la salida de Outeiro de Rei hasta casi el polígono de O Ceao.
Control rutinario
Fuentes de la Guardia Civil de Lugo explicaron que el control que se llevó a cabo ayer en la autovía fue de tipo rutinario, como tantos otros que se realizan durante todo el año por la provincia lucense, y negaron estar buscando algo específico.
Este tipo de controles, en los que se detienen a vehículos aleatoriamente para registrarlos, pueden ser de diversos tipos, desde inspecciones por alcoholemias, control de documentación o antiterrorismo, entre otras cosas.