La repercusión mediática que ha tenido este año la subida al puerto de Ancares (1.670 metros), por la vertiente de Pan do Zarco, conocido como el Mortirolo español, ha consolidado esta cima como una de las citas imprescindibles del ciclismo en España durante las próximas décadas. En el 2011 se subió por primera vez en dirección a Ponferrada y al año siguiente fue final de etapa, ganada por Purito Rodríguez. Ambos pasos fueron por una de las cuatro vertientes, la de Murias, de 16,7 kilómetros al 6,5% de pendiente media y con una rampa máxima del 17%. Pero este año la Vuelta se atrevió a subir Ancares por Pan do Zarco, 12 kilómetros al 9,2% de pendiente media y rampas del 20%.
Para preparar el terreno, el periodista Daniel Friebe y el fotógrafo Pete Goding, ambos especialistas en ciclismo, publicaron el libro Ascensiones secretas. 50 nuevos puertos que deberías descubrir, que daba continuidad a otro del 2012 sobre las 50 ascensiones míticas del ciclismo, editados por Lundwerg para todo el mundo. De esta forma, Ancares pasa a formar parte de una serie de ascensiones que se han ido haciendo famosas en los últimos años por ser descubiertas en el Tour, el Giro y la Vuelta. En el libro, además de la subida lucense, se destaca las españolas Bola del Mundo (sierra de Navacerrada), Larrau (en Navarra, un puerto casi al nivel de Ancares), Xorret del Catí (Alicante) y Lagunas de Neila (Burgos). En la lista de nuevos puertos destacan Manghen, Fauniera, Paso Giau y Crostis (Giro, aunque este último nunca se llegó a subir por temor a desprendimientos), Gran Ballone de Alsacia, Balés, Marie Blanque o la cara oculta del Alpe D? Huez (Tour) o el viejo Kwaremont (Tour de Flandes) y Stockeau (Lieja-Bastogne-Lieja).
En la publicación, el ganador del Tour del 2008, Carlos Sastre, destaca que sin lugar a dudas Ancares es el puerto más duro que se puede subir en España, al mismo nivel que cualquiera de los míticos, llámese Tourmalet, Mortirolo, Mont Ventoux, Gavia, Stelvio o Aubisque, y más que Lagos y Angliru en España.
Friebe señala en el libro que unir los 12 kilómetros de Ancares con los 10 del puerto anterior, Folgueira de Aigas, con pendiente media del 6,7%, puede equiparar a la cima lucense con la mezcla entre Telegraphe y Galibier, una de las subidas más largas y duras de continente. Friebe, además, señala el carácter de tierra abandonada e emigrante de Os Ancares y cómo el ciclismo ha ayudado a revivir a la comarca.