Medio Ambiente analizará si la reposición es viable o si han de elegir otra clase
29 jul 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Los operarios del departamento de parques y jardines de Lugo comenzaron ayer a talar los diez árboles que Medio Ambiente detectó como peligrosos para la seguridad ciudadana. Los trabajadores empezaron por los tilos de la avenida Ramón Ferreiro y hoy continuarán con los demás. En total, estos días talarán seis tilos en el bulevar de Ramón Ferreiro, otro en García Portela, uno más en Rodríguez Mourelo, una pícea en las Costas do Parque de Rosalía y una palmera en Frigsa.
«Cando caeu a árbore en Ramón Ferreiro encargamos un estudio a Parques e Xardíns para ver o estado no que se atopan as árbores das zonas máis transitadas da cidade», explica el concejal Álvaro Santos. Ese análisis detectó que de todos los árboles revisados, diez estaban en malas condiciones, podían suponer un peligro y no eran recuperables. «Fíxose un repaso do estado xeral da árbore, da codia, do tronco, revisáronse as podas, e nalgún caso xa se detectou que estaba seco», abunda.
Vista la situación, optaron por talarlos, y esa es la tarea que llevan a cabo estos días. Los trabajos, imputados al mantenimiento de las zonas verdes, rondarán los 15.000 euros, aproximadamente. Una vez finalizados, habrá que quitar las raíces y las cepas, pero esto no tiene por qué ser inmediato. Hay que tener en cuenta que las raíces pueden estar sujetas a canalizaciones, por lo que el trabajo deberá ser más concienzudo.
Una vez finalizada esta tarea, será cuando tocará pensar en la sustitución de los árboles talados. «Non vai haber unha reposición inmediata porque ademais agora non estamos en tempo de plantar. Substituiremos os actuais por árbores semellantes ás que hai nas súas inmediacións sempre e cando os enxeñeiros vexan posibilidades de que enraícen e medren, e que sexan compatibles coas canalizacións que van soterradas. Se por exemplo vemos que algunha árbore estaba máis illada e molestando nalgún sitio, poderíamos buscarlle unha substituta de menos envergadura», abundó el edil de Medio Ambiente, que prioriza la seguridad aunque pensando en la apuesta por la ciudad verde.
Los 46 ejemplares que deberán revisarse de nuevo serán trepanados para analizarlos
El informe técnico elaborado por Medio Ambiente repasó el estado de 189 árboles situados en las avenidas Rodríguez Mourelo, García Portela, Ramón Ferreiro, en los parques de Rosalía y Frigsa y en la calle Cantiño Nemesio Cobreros. Las conclusiones fueron que diez árboles necesitaban ser talados, pero también que era necesario revisar próximamente varios más, concretamente, otros 46.
De estos, doce deberán ser revisados en períodos de seis meses, 20 en el plazo de un año, 11 en el plazo de dos años y uno en un período de tres años. «Trátase de árbores que presentan certo deterioro e que se someterán a un estudo instrumental. Isto consiste en que se trepana a árbore para sacar as conclusións pertinentes», describe Álvaro Santos. Es precisamente por ese motivo, para evitar que todos los árboles se trepanen, por lo que solo una parte de ellos se someten a los llamados estudios instrumentales.