Retiran residuos de gran tamaño en los barrancos del geoparque Montañas do Courel
LUGO
La primera intervención fue realizada por deportistas voluntarios y tendrá continuidad el 25 de este mes y el 16 de octubre
13 sep 2021 . Actualizado a las 05:00 h.En el municipio de Quiroga se llevaron a cabo el fin de semana las primeras actividades de unas jornadas de limpieza de lugares de interés geológico que organiza el geoparque Montañas do Courel. En la iniciativa -denominada por los organizadores como jornada de geoconservación- se han retirado numerosos desperdicios en el llamado barranco del Regueiro Seco, en el entorno del plegamiento geológico de Campodola-Leixazós, uno de los parajes emblemáticos del geoparque.
La recogida de los desperdicios corrió a cargo de voluntarios expertos en barranquismo, ya que los lugares donde se efectuaron las operaciones no son accesibles sin equipos de escalada. Los residuos, según explican los promotores de estas actividades, serán gestionados de acuerdo con la legislación medioambiental vigente y depositados en vertederos correspondientes a cada tipo de desperdicios. «Aínda que son sitios recónditos, os voluntarios recolleron residuos grandes e pesados, como rodas de camión e de coche, tubaxes e bidóns», explica Roberto Castro, teniente de alcalde de Ribas de Sil y presidente de la asociación Montañas do Courel, que agrupa a los tres municipios del geoparque. Entre los materiales recogidos se encontraba incluso una bionda. «É incrible a cantidade de lixo que se bota nestes lugares a pesar do seu valor ambiental e paisaxístico», añade Castro. El Ayuntamiento de Ribas de Sil colaboró en la operación aportando un camión de recogida de desperdicios que fue adquirido recientemente y que se utiliza como punto limpio móvil.
Las próximas jornadas previstas en esta iniciativa de geoconservación se desarrollarán el 25 de este mes y el 16 de octubre en las cuevas de Chao da Espiña y Romeor, en el municipio de Folgoso do Courel. Esta es la primera vez que en el territorio del geoparque se lleva a cabo una campaña de este tipo desde que el territorio fue reconocido como tal por la Unesco, en abril del 2019. Con anterioridad, los barranquistas que visitan la zona han recogido en numerosas ocasiones los desperdicios que van a parar a los lugares de interés geológico. «Pero ata agora non se fixera nada de forma organizada, con voluntarios e durante varios días», señala Castro.