Un juzgado investiga quién arrancó carteles de la Feira do Queixo de Friol

Enrique Gómez Souto
enrique g. souto LUGO / LA VOZ

LUGO CIUDAD

La Feira do Queixo de Friol la organiza el Ayuntamiento.
La Feira do Queixo de Friol la organiza el Ayuntamiento.

Tendrá que declarar el responsable de la empresa de limpieza de Lugo

21 ene 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Es probable que no se produzca un conflicto diplomático entre los ayuntamientos de Friol y de Lugo, pero sí hay una investigación judicial para aclarar quién arrancó los carteles y pancartas que colocaron los friolenses en los accesos a la capital lucense para anunciar al menos dos ediciones de su Feira do Queixo. El alcalde de Friol no quiere hablar de este asunto, porque está en manos judiciales, y, prudente, aplaza a la resolución del caso el dar explicaciones. En los próximos días prestará declaración, según indican algunas fuentes, el responsable de la empresa de limpieza de Lugo.

La historia de los carteles anunciadores de la popular y siempre concurrida Feira do Queixo de Friol tiene miga. Casi por tradición, los organizadores de la feria colocan en los accesos a la capital lucenses carteles sobre paneles de madera y pancartas. Un año, comprobaron que habían sido retirados; se preocuparon, pero parece que no le dieron mayor importancia. Al año siguiente ocurrió lo mismo. Pero esta vez, volvieron a colocarlos. Al año siguiente, lo mismo. Y ya se acabó la paciencia de los organizadores de la feria, que decidieron tomar cartas en el asunto. Hicieron algunas gestiones por vía oficial que, según algunas versiones, no dieron mayores resultados. Y como a grandes males, grandes remedios, parece que se decidieron a contratar los servicios de un investigador privado.

Con la información recogida, se fueron al juzgado y presentaron denuncia. Y fue admitida a trámite, de modo que ya prestó declaración en su momento el propio alcalde de Friol, Antonio Muíña; por cierto, su presencia para dicho fin en sede judicial coincidió con la de algunos de los citados en relación con uno de los casos más notables de los que se investigan desde el edificio de la plaza de Avilés de la capital lucense. Y hubo quien a punto estuvo de sacar conclusiones apresuradas y nada acertadas.

Cambio de rumbo

Al parecer, la tolerancia en el municipio de Lugo con la cartelería de la Feira do Queixo era casi una tradición, al igual que ocurre con otra para distintos fines. Pero llegó un momento en el que, según parece, alguien decidió que los carteles, que no estaba autorizados y además en algunos casos estaban situados en puntos poco afortunados, debían ser retirados. Y así está ahora el asunto, mientras el Concello de Lugo tramita una ordenanza que regulará la publicidad exterior. Es una norma cuya necesidad es innegable, aunque solo sea para poner orden en la publicidad en algunas instalaciones deportivas municipales. El gobierno local quiere aprobar el documento en este año, según expuso en su momento el concejal Luis Álvarez. El presidente de la corporación de Friol guarda silencio. Pero solo por ahora.