El SLG alerta sobre ataques directos de la rata topo en granjas de Lugo

Somos Agro REDACCIÓN / LA VOZ

LUGO CIUDAD

cedida

Exige que se ponga en marcha un plan de choque y que se prohíba la caza del zorro en la zona

17 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La rata topo ya no solo está afectando a los prados de Lugo. Explica en el Sindicato Labrego Galego que a sus manos han llegado ya denuncias de ataques directos de este roedor en granjas de Pedrafita do Cebreiro. Aquí, este animal está ocasionando cuantiosas pérdidas en la hierba ensilada y en al cosecha de nabos. La formación considera que, en realidad, son más de dos mil las hectáreas de la provincia afectadas por esta plaga y reclama que se ponga en marcha un plan de choque y que se prohíba la caza del zorro en la zona.

La formación sostiene que entre las medidas que la Xunta planea poner en marcha, está la de hacer una campaña de trampeo en coordinación con las granjas. Pero considera que «vai resultar insuficiente». Argumenta que una de las principales causas de esta plaga es el descenso poblacional de sus depredadores naturales, entre ellos el zorro, por la caza tanto legal como furtiva. Por eso el SLG ve necesario que Medio Ambiente decrete la prohibición de cazar cualquier depredador de la rata topo en los municipios afectados y en los limítrofes, «pois de continuar a presión sobre os seus depredadores o desequilibrio ecolóxico agudizarase e a crise empeorará».

Campeonato en Triacastela

Teniendo en cuenta estos argumentos, el SLG critica la celebración del campeonato de caza del zorro, que se llevará a cabo en los municipios de Triacastela y Láncara. Considera que la Xunta debería prohibir de forma cautelar esas actividades. Además, argumenta que Medio Rural no puede mirar para otro lado ante las pérdidas que está sufriendo las granjas y debe crear una línea de ayudas para compensarles. Al fin y al cabo, añaden, «a permisividade da Xunta co exterminio indiscriminado dos predadores naturais da rata toupa fai que sexa, en parte, tamén responsable da crise». Por último, la formación reclama una reunión con agentes sociales de los sectores económicos y zonas afectadas para coordinar esfuerzos y buscar la mejor solución posible a una plaga que en comunidades vecinas, como Castilla León, afecta ya a 1,6 millones de hectáreas y causó 30 millones de euros en pérdidas, además de que hay medio centenar de personas contagiadas por tularemia.