Long Hope retiraría su demanda contra Oslo si se sentase con España a negociar la pensión que les niega
PESCA Y MARISQUEO
Reclaman que se les reconozca el derecho que se les negó en su día por no residir en suelo noruego, discriminándolos así por nacionalidad
13 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Long Hope, la asociación de exmarineros que trabajaron en mercantes noruegos sin generar derecho a pensión, considera un avance que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mantuviese el miércoles un aparte en paralelo a la cumbre de la OTAN con su homóloga noruega, Erna Solberg, para abordar un caso que afecta a miles de jubilados españoles. «É algo que xa se tiña que ter feito no seu día pero que non se fixo», explicó Alberto Paz, portavoz de la agrupación, que cargó duramente contra la presidenta noruega. El colectivo considera una mala excusa que Solberg se haya escudado en que el caso está en los tribunales para evitar entrar en la cuestión. Porque si la cuestión está en manos de la Justicia «é por culpa dela e do seu Goberno, pola súa avaricia, egoísmo e mala fe», apuntan desde Long Hope.
Es más, la agrupación aseguró que está dispuesta a retirar la demanda si Noruega se aviene a negociar con España -en presencia de representantes de los afectados, por supuesto-, para reconocer a estos trabajadores el derecho que consideran que les asiste y que se les negó en su día por no residir en suelo noruego, discriminándolos así por nacionalidad, puesto que los nacionales que no tenían allí su domicilio sí podían beneficiarse de su sistema de protección social. Así que «que non se escude en que o caso está nos tribunais, está porque ela quere».
Primer fondo soberano
Long Hope cargó contra la presidenta noruega por «seguir tratando a España como o facía nos tempos de Franco, cando cometeu unha estafa e un roubo aos mariñeiros españois». El colectivo incluso habla de «egoísmo, avaricia e racismo» por parte del Gobierno de Oslo, dado que «non é por falta de cartos polo que nos denega o dereito a pensión». De hecho, Paz pone el acento en que el noruego es el primer fondo soberano del mundo y que su negativa a reconocerles la prestación supone «unha deslealdade para os que lle axudaron a levantar o país».
Los jubilados seguirán con su batalla legal en los tribunales y con su protesta en las calles de las principales ciudades europeas. El sábado 21 se manifestarán en Dublín y ya el mes que viene, en Estocolmo.