El retorno de los gallegos que emigraron tras la crisis del 2008

Lorena Maya

MIGRACIONES

MARCOS MIGUEZ

Cuatro de cada 10 retornados cuentan con estudios universitarios y más de la mitad son mayores de 50 años. La búsqueda de empleo es una de las principales preocupaciones de los gallegos que deciden regresar y antes de volver a casa pasan una media de 12,7 años en el extranjero

08 jun 2020 . Actualizado a las 11:31 h.

La crisis financiera del 2008 puso en marcha un proceso migratorio que tuvo en parte como protagonistas a los españoles más jóvenes que, sin posibilidades de encontrar empleo, decidieron marchar. Sin embargo, en los últimos cinco años esa situación comenzó a revertirse y alrededor de un 30 % de los gallegos que emigraron por la inestabilidad económica han vuelto a casa. El dato se desprende de una encuesta realizada por La Voz de Galicia en colaboración con la Secretaria de Estado de Migraciones del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Los datos arrojan que antes de decidir su retorno los gallegos pasan en promedio 12,7 años viviendo en el extranjero. Y un 56,5 % de quienes finalmente regresan tienen más de 50 años.

Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en el primer semestre de 2019 Galicia fue la comunidad que recibió a más españoles que vivían en el exterior con un total de 2.862 retornados. Del total de encuestados, cuatro de cada diez son asalariados y un 9 % son autónomos, mientras que los jubilados representan el 29 %.

Pese a que más del 40 % de los retornados cuenta con estudios universitarios superiores y el 22 % tienen formación profesional, la búsqueda de empleo es una de las principales preocupaciones de los gallegos en edad productiva.

Antes de iniciar la operación retorno un 40,6 % vivía en un país europeo con Suiza (29,5%) y Reino Unido (25 %) como principales destinos. El 71, 4 % de los emigrantes que partieron a América radicaban en Estados Unidos.

Con el objetivo de conocer en profundidad los motivos que propiciaron la vuelta a casa y como parte del trabajo de investigación, se realizó también un encuentro presencial con retornados gallegos procedentes de seis países distintos: Reino Unido, Alemania, Venezuela, Perú, Honduras y Países Bajos. Los participantes coincidieron en señalar que las principales motivaciones de la salida de Galicia fueron económicas o laborales. Sobre todo los más jóvenes, quienes aseguran que tras culminar los estudios no veían posibilidades de encontrar trabajo por lo que decidieron marchar. Sin embargo, son las razones afectivas o sentimentales las que tienen un mayor peso al decidir volver. Hay entonces una necesidad de «regreso al hogar» y también de seguridad tanto física como emocional. En muchos de los casos el punto de inflexión para tomar la decisión de retornar fue el deseo de formar una familia. De esa forma, entre las ventajas del retorno, los participantes del estudio destacaron la importancia de volver a reunirse con familiares y amigos, y la calidad de vida que tienen en Galicia.

Más allá de esa valoración positiva, los retornados insisten en que después de vivir tantos años en el extranjero, volver a casa para «comenzar de cero» resulta sumamente complicado. Entre los inconvenientes más señalados se encuentra la búsqueda de trabajo.

Pese a que esa dificultad podría estar ligada a la edad de los retornados, lo cierto es que los más jóvenes también coinciden en que la falta de empleo es la principal barrera a la que se enfrentan cuando deciden retornar. De ahí que muchos de los entrevistados aseguren que no dudarían en volver a hacer la maleta en una situación de necesidad financiera o si se dieran las mismas circunstancias que los llevaron a tomar la decisión de irse.

 

El aumento de la galleguidad

Por otra parte, cuanto más tiempo han pasado viviendo en el exterior, mayor es el proceso de decisión de retorno y de adaptación al regreso. Aunque en muchos de los emigrantes que pasaron gran parte de su vida en otro país surge un sentimiento de falta de pertenencia e identidad, la mayoría de los participantes dice haber experimentado «un aumento de la galleguidad».

A la hora de valorar la posibilidad de retorno, el aumento de las visitas a Galicia juega un rol importante, impulsado por la oferta de vuelos de bajo coste, aunque los retornados afirman que no son conscientes de qué es lo que se genera primero: el aumento de los viajes a «casa» o el deseo de volver. También el uso de las redes sociales, videollamadas y el fácil acceso a la información de la actualidad gallega ayudan a mantener el vínculo con la «patria». Una vez que el deseo de regresar se instala, la vuelta se materializa más rápidamente que la salida.

Los emigrantes destacan especialmente el valor de la experiencia a nivel personal, que les ayudó a «adquirir perspectiva». Durante su estancia fuera su percepción de Galicia mejoró y comenzaron a valorar aspectos a los que antes daban menor importancia como el fácil acceso a los servicios sanitarios y la seguridad.

Ayudas para volver 

Con el objetivo de facilitar la vuelta a casa, el Gobierno puso en marcha el año pasado el Plan de Retorno a España, una batería de 50 medidas que pretenden remover las principales barreras laborales, administrativas y personales con las que se encuentran quienes buscan regresar. Las medidas se dividen en seis categorías y abarcan tanto el apoyo para definir un proyecto profesional, con conexión con empresas, el acceso al empleo público y las opciones para emprender; la ayuda para planificar la vuelta e instalarse y la creación de espacios para la participación, así como el acompañamiento psicológico durante el proceso. Además, se implementó una ventanilla única de retorno en la que se ofrece información oficial y contrastada sobre los procesos y la documentación necesaria; un servicio de mediación laboral y un buscador de empleo.