
El sistema de llamada de emergencia, conocido como «eCall», será obligatorio en los automóviles europeos desde abril de 2018 y permitirá reducir un diez por ciento las víctimas mortales de tráfico
11 may 2015 . Actualizado a las 13:46 h.Dentro de las normas de seguridad que toma el Parlamento Europeo con relación al tráfico se acaba de aprobar la obligatoriedad de equipar con el sistema de llamada automática de emergencia a todos los turismos y furgonetas vendidos en la Unión Europea a partir de 2018. Se estima que esta medida hará descender un 10% la mortalidad de los accidentes de tráfico.
La inmediatez a la hora de recibir ayuda tras sufrir un accidente de tráfico es crucial para salvar vidas y este sistema la garantiza. Todos los coches deberán ir equipados con GPS y teléfono para facilitar su localización. A partir de ahí, en caso de accidente, hay dos maneras de activar el sistema. Por propia voluntad del conductor que dispone de un botón rojo en el habitáculo del coche que al pulsarlo lo pone en contacto con una centralita europea del 112 que recoge su llamada y le pide los datos del lugar y circunstancias del accidente para a continuación avisar a los centros de emergencia, bomberos, policía y ambulancias más cercanos que acuden en ayuda de la víctima. El otro sistema se pone en marcha de forma automática, en el caso de que el conductor haya quedado inconsciente o sea incapaz de activar manualmente el botón rojo. En ese caso el coche que ha sufrido un accidente emite por su propia cuenta una llamada de alarma a la centralita que se comunicará con el conductor en el interior del coche y si este no responde activará los datos de su posición a los servicios de emergencia que acudirán de inmediato.
Anticipándose a esta obligatoriedad algunas marcas de automóviles ya hace años que tienen instaurado este sistema de forma opcional, como el grupo PSA en Citroën y Peugeot, o Volvo. Se estima que en los casos de sus clientes ya han salvado más de siete mil vidas.
La obligatoriedad del sistema a partir de 2018 conlleva, sin embargo, algunas dudas. Una de ellas es cómo repercutirá el eCall en el precio final de un coche. En el caso de los más económicos puede ser gravoso, ya que el sistema obliga a imponer un GPS y un teléfono con manos libres en cada coche.
El otro problema es el de la privacidad. El GPS en el coche sirve para tenerlo siempre localizado y el buen uso de esa información tiene que estar salvaguardado.
Y es que este sistema permitiría también la localización de todos los vehículos, en caso de robos o desapariciones, como segunda utilidad, aún sin legislar.
La normativa está ahí y seguramente los fabricantes generalizarán ya el uso del eCall antes de la entrada en vigor de esta obligación.
De momento lo primero que hacemos en caso de accidente es ponernos en contacto con las emergencias a través de nuestro propio móvil y por eso es importante recordar que llevar el móvil suelto en el interior del habitáculo es un error, ya que en caso de accidente el aparato puede salir despedido fuera del alcance del conductor o perderse. Por tanto en el bolsillo del pantalón o en una guantera cerrada es más seguro. También es conveniente saber como leer las coordenadas de situación que todos nuestros móviles ofrecen, para poder darlas en caso de accidente.