Lujo, versatilidad y reminiscencias camperas, esas pueden ser tres premisas ineludibles de Range Rover y las tres están impresas en el ADN de este Velar, que por tamaño se sitúa muy cerca del Sport. Un coche que marca también una nueva época tecnológica para el fabricante, al compartir plataforma con el Jaguar F-Pace.
12 nov 2017 . Actualizado a las 08:23 h.El nuevo Velar mide 4,80 metros de largo, por lo que solo es cinco centímetros más corto que su hermano el Range Rover Sport. Su precio parte de los 60.250 euros, lo que quiere decir que está diez mil euros por debajo del de su hermano mayor.
Así se sitúa el nuevo Velar en la gama de Range Rover, donde viene a marcar un paso adelante sobre todo en el apartado tecnológico y en el diseño de su interior.
Por fuera es más reconocible con sus hermanos, sobre todo en la parrilla común, aunque las ópticas, tanto delante como detrás, se han afinado. La trasera del Velar tiene mucho ángulo a nivel del portón y lateralmente se define también por una línea de cintura alta y tres ventanillas.
Es en el interior donde más ha cambiado la filosofía de Range en este Velar, que ahora resulta más minimalista al meter la mayoría de la botonería dentro de dos grandes pantallas centrales en el salpicadero, dejando muy limpio el interior. Hay que decir también que a cambio el volante recibe dos grandes satélites en su interior, cada uno a un lado, con diez funciones diferentes.
A nivel mecánico el Velar es un coche de moderna arquitectura hecha en aluminio como principal componente. Es la forma de que este modelo pese menos de dos toneladas. Otra particularidad importante está en las suspensiones neumáticas, de serie en las versiones V6, pero opcionales en todas las demás, que le confieren un confort sobresaliente a este modelo, al tiempo que le brindan más posibilidades off road, ya que pueden aumentar la altura libre al suelo. Precisamente, su conducción fuera de asfalto le aporta diferencias respecto a sus rivales del segmento SUV de lujo, como el Audi Q5 o el Mercedes GLC.
La gama de motores que incorpora el Velar se compone de dos turbodiésel de 2 litros, uno con 180 y otro con 240 caballos, y un tercer motor también de cuatro cilindros y dos litros, en este caso de gasolina y 250 caballos.
Por arriba las gamas de gasolina y diésel culminan con sendos motores V6 de 3 litros, el diésel con 300 caballos y el gasolina con 380. Todas las versiones del Velar llevan tracción total y cambio automático de ocho velocidades.
Con dos diferenciales, uno central y otro trasero, las suspensiones neumáticas y el sistema Terrain Response perfeccionado, el Velar no necesita de las arcaicas reductoras para ser un todocamino eficaz. Este sistema electrónico permite adecuar la tracción al tipo de terreno, ya sea en hierba, en barro o en nieve, y puede hacerlo ahora también de forma automática, sin que el conductor tenga que intervenir. Es precisamente en el uso todoterreno donde el Velar está un paso por delante de sus rivales. Pero al mismo tiempo muestra dinamismo sobre el asfalto. Este coche marcará las líneas maestras de los próximos Range Rover, sobre todo a nivel de estilo interior y tecnologías de entretenimiento. Para la marca supone una nueva silueta, que puede rentabilizar el éxito del Evoque, su hermano pequeño.