El nuevo Opel Combo, en su versión Life de pasajeros, se ha beneficiado de las sinergias del grupo PSA para heredar la plataforma MQB y fabricarse en Vigo. Eso supone pasar de una furgoneta derivada, como era antes, a un coche que puede estar a medio camino de un monovolumen o un SUV, con grandes potencialidades para el ocio y el tiempo libre.
14 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.L e ha sentado bien el cambio al Combo Life, hermanado ahora con el Peugeot Rifter y el Citroën Berlingo y elevado al grado de turismo con la misma plataforma que tiene, por ejemplo el Citroën C4 Spacetourer. Hoy vamos a hablar de la versión Life de pasajeros y dejamos para otra ocasión el furgón, destinado al mundo del trabajo.
Como sus primos franceses el Combo Life tiene dos longitudes a elegir, una de 4,43 metros, ya de por sí amplia, y otra XL que llega a los 4,75 metros.
Se supone que el Combo aporta una personalidad más sobria y robusta, como corresponde a la marca alemana del grupo, y así se aprecia en su frontal, con una gran parrilla y alto capó. Los prominentes pasos de rueda y las barras cromadas del techo le proporcionan un aspecto atlético y desenfadado, mientras el acceso está optimizado para las plazas traseras con unas cómodas puertas corredizas y un portón posterior enorme, que además permite abrir la luneta independientemente para meter pequeños objetos.
ALEGRE INTERIOR
Pero donde realmente sorprende el Combo Life es cuando nos ponemos al volante. Ni se nos pasa por la cabeza que esto tenga nada que ver con una furgoneta. Nos encontramos con un volante multifunción con numerosos mandos incorporados, reposabrazos laterales, una consola central muy alta donde podemos guardar infinidad de objetos con facilidad, una posición de palanca de cambio muy cercana y sobre todo un salpicadero dominado por una pantalla de hasta ocho pulgadas con sistema IntelliLink y conexión para móvil, ya sea Android o Apple. Además, el techo panorámico con espacio de almacenamiento central e iluminación LED, aunque opcional, es muy recomendable para disfrutar de este coche.
En la toma de contacto nos sorprendió su buena insonorización y calidad de rodadura, y además las plazas traseras cuentan con tres asientos independientes con anclajes Isofix que lo convierten en un vehículo ideal para familias numerosas.
En lo que respecta a motorizaciones cuenta con motores diésel que cumplen la norma Euro 6D como el 1.5 de 130 caballos, con una novedosa caja de cambios automática de ocho velocidades, además de otras dos versiones más reducidas con 102 y 76 caballos de potencia.
La única versión de gasolina, que será minoritaria, es un 1.2 Turbo de tres cilindros con 110 caballos de potencia, unida a la caja de cambios manual de seis velocidades.
En cuanto a los precios con los que ya está a la venta en la red de concesionarios este Opel Combo Life, podemos decir que parten de los 21.600 euros de la versión diésel de 76 caballos con acabado Expression y llegan hasta los 28.750 euros de la versión diésel de 130 caballos y acabado Innovation con la caja automática de ocho velocidades.
INTERIOR CÓMODO Y BIEN RESUELTO
La ergonomía es lo más destacado del nuevo Opel Combo Life, que, además de un gran maletero y un fácil acceso a sus tres asientos posteriores, brinda a su conductor un espacio adecuado para conducir con comodidad y disponiendo de todas las funciones del vehículo a su alcance.
UN VEHÍCULO POLIVALENTE Y JUVENIL
El Opel Combo Life conserva su carácter alemán dentro del grupo PSA, pero ahora aporta frescura y sobre todo versatilidad para su uso por jóvenes y familias numerosas.
ADAPTADO A TODAS LAS NECESIDADES
Además de conectividad, el Combo Life ofrece facilidades para los practicantes de deportes de naturaleza o para las familias numerosas, con numerosos huecos portaobjetos y fácil acceso a su maletero.