La DGT tiene previsto instalar este año 88 nuevos radares en las carreteras españolas. La mayoría de los dispositivos estarán ubicados en vías convencionales y el 60 % de ellos serán de tramo, que controlan la velocidad entre dos puntos durante varios kilómetros.
22 abr 2024 . Actualizado a las 14:55 h.Son más justos de cara al conductor y, al mismo tiempo, también son más efectivos en el objetivo de reducir la velocidad media en las carreteras. Es lo que piensan los responsables de la Dirección General de Tráfico sobre los radares de tramo, unos sistemas que ya son conocidos desde hace años por los conductores y que controlan la velocidad media registrada durante varios kilómetros entre dos puntos. Cuando un vehículo pasa por el primero se activa una cámara de visión artificial que lee la matrícula y que graba la hora exacta de entrada en el tramo. Una segunda cámara recoge la hora a la que el coche sale del espacio controlado. El sistema calcula entonces el tiempo que el vehículo ha empleado en recorrer el tramo y la velocidad media. Si se ha superado el límite establecido, el radar procesa una denuncia y transmite los datos por vía telemática al Centro Estrada, un complejo en el que se tramitan todas las denuncias de velocidad captadas por radares y que está situado en León.
88 RADARES NUEVOS EN ESPAÑA
El director general de Tráfico anunció la semana pasada que está prevista la colocación de 88 nuevos radares en el conjunto de la red viaria española durante este año. La mayoría estarán colocados en las carreteras convencionales y el 60 % de los que se instalen serán de tramo. Los avances tecnológicos permiten que ahora la vigilancia de la velocidad en un tramo concreto se pueda realizar en cualquier tipo de carretera. Eso era más complicado cuando, hace más de diez años, empezaron a instalarse los primeros radares de ese tipo, pues solo podían ubicarse en redes de alta capacidad, como autovías y autopistas que contaban con las conexiones necesarias. Lo que no ha trascendido hasta el momento es la ubicación final de los nuevos radares. Según fuentes de Tráfico, los técnicos de la Subdirección de Movilidad y Tecnología de la DGT aún están concretando las zonas exactas para colocar los nuevos controles, como sucede, por ejemplo, en el caso de Galicia, donde aún no están definidas las ubicaciones ni cuántos se instalarán.
Los radares de tramo son más efectivos porque ayudan a reducir la velocidad media de circulación
MEJOR DE TRAMO
Lo que sí se sabe, como ya anunció Pere Navarro, es que la mayoría de los radares serán de tramo. Se considera que son más justos porque la denuncia no podrá atribuirse a un despiste ya que para que un conductor sea sancionado tiene que circular con exceso de velocidad durante varios kilómetros. También se apostará por ubicarlos en carreteras convencionales, que son las de un solo carril por cada sentido y sin mediana de separación. En ese tipo de vías se producen tres de cada cuatro accidentes mortales.
LA INFRACCIÓN CON MÁS MULTAS
Esta semana se desarrolló una campaña especial de vigilancia de la velocidad, principal causa de accidentes graves, según los datos de la DGT. Además, las infracciones por excesos de velocidad son las que más puntos retiran a los conductores españoles. El año pasado fueron más de 48.000 conductores los que fueron denunciados por superar los límites de velocidad y perdieron casi 120.000 puntos de su carné. Además, fueron sancionados con multas de entre 100 y 600 euros.