«Salí del centro de salud al que mi madre me llevaba de niño con una sensación de abandono difícil de encajar»
OPINIÓN
Una consulta por cita
Concurren en uno tres dolencias solapadas, con similar gravedad y todas inoportunas para un autónomo de jornadas maratonianas y semanas interminables de seis días laborales. Acude uno esperanzado a su médica de cabecera a presentarle su cuadro. En actitud displicente, esta dirige su dedo índice hacia un letrerillo que asoma en la pared, justo tras su cabeza, y en el que se lee: «Solo una consulta por cita».
Demoré mi visita al médico cuanto pude porque mi tiempo es también muy escaso y volver me resultará difícil por el mismo motivo. En 52 años he acudido poco al médico; no he estado jamás de baja, no la necesito, solo —casi— consejo médico; cotizo en el tramo más alto que se me permite, un dineral, y salí del centro de salud al que mi madre me llevaba de niño con una sensación de abandono difícil de encajar. A. I. A Coruña.
A linguaxe non sexista como norma
Diariamente, cando entro na miña aula, o primeiro que fago é acender o computador; van iniciándose un a un os programas e as ligazóns que están programados por defecto. Un deles é o portal educativo da Consellería de Educación, no que leo o seguinte titular: «As ensinanzas de adultos reforzaranse coa nova Lei de Aprendizaxe ao longo da vida». Unha vez máis constátase a irregular aplicación dunha linguaxe non sexista polos diferentes servizos da Administración.Non esquezamos que os usos sexistas da linguaxe fan invisibles ás mulleres e impiden ver o que se esconde detrás das palabras. A finalidade da linguaxe non sexista é evitar opcións léxicas que poidan interpretarse como discriminatorias. Usemos a palabra persoa por ser máis inclusiva, e pasemos a falar de «o ensino de persoas adultas». Luis Vázquez García. Arzúa.
Ese coruñés que se va
Leo en este mismo diario que A Coruña pierde población, a chorros, en beneficio de todo su cinturón municipal (Arteixo, Culleredo y Oleiros), algo que a nadie puede sorprender, ya que dichos municipios han explosionado ante nuestras atónitas y complacientes narices.
Décadas de proyectos urbanísticos frustrados por una larga tradición municipal en el «no» a todo. Percebeiras no, Visma no, puerto no, As Xubias no... y así todas cuantas iniciativas de desarrollo se plantean, y que parece tener como meta convertir la ciudad en un balneario sin más futuro que su decadencia.
Todos esos coruñeses que se ven expulsados de su ciudad por una clase política de una mediocridad apabullante y que como programa político manejan el infantil enfrentamiento ante cualquier iniciativa privada; que paralizan y boicotean los planes de crecimiento de la ciudad y a los que el actual gobierno (en histórica minoría) sigue empeñado en agarrarse.
Que aún no tengamos estación del AVE, ampliación de Alfonso Molina o desarrollo del plan del puerto es la prueba irrefutable de dicha estrategia. Expulsar a ciudadanos de su propia ciudad es algo que tendría que obtener una pronta y contundente respuesta por parte de los que (aún) podemos votar en ella. Juan Carlos Mella Varela. A Coruña.
A estrada a Montefaro
Diría que para ser político é fundamental cumprir tres condicións: ter o que se coñece popularmente como labia, non poñerse en ningún caso roxo e ter o don para dicir podo prometer e prometo e onde dixen digo, digo Diego. Os representantes que fan que funcione o Concello de Mugardos están nesa liña, pois non sei nin as veces que foron a falar os veciños o tema da estrada de subida ao mosteiro de Santa Catalina, que xa non hai por onde collela, e sempre se sae do concello con boas palabras, pero xa van pasando os anos e como dicía aquel cantante: «La vida sigue igual». A estrada ten tantas fochancas que hai moitos coches que inician a costa e a uns 50 metros deixan caer o coche para atrás e desisten de visitar o mosteiro. E logo gastamos cartos en promover a zona. J. M. Sousa. Mugardos.
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