La eólica marina flotante: una oportunidad para Galicia

Juan Virgilio Márquez TRIBUNA

OPINIÓN

María Pedreda

03 ene 2025 . Actualizado a las 04:46 h.

Galicia se encuentra en una posición privilegiada entre los primeros puestos para liderar el desarrollo de la energía eólica marina en España. Los parques eólicos marinos y su industria son una oportunidad para diversificar y fortalecer la economía gallega, siempre desde un enfoque sostenible y respetuoso con otras actividades. España tiene como objetivo la instalación de 3 GW de energía eólica marina para el 2030. Galicia, con su ubicación estratégica y condiciones de viento favorables, puede desempeñar un papel esencial en este despliegue.

Uno de los principales beneficios que la eólica marina puede aportar es la creación de empleo. Alcanzar el objetivo a 2030 implica la creación de 7.500 nuevos puestos de trabajo en actividades de ingeniería, análisis ambientales, fabricación de componentes, construcción y operación de infraestructuras, logística y el mantenimiento de parques marinos.

En este contexto, Galicia sería una de las grandes beneficiadas, ya que los puertos y los astilleros gallegos desempeñan un papel estratégico. Es más, los puertos ya están dando los pasos para aumentar sus capacidades y convertirse en centros logísticos clave para la construcción, ensamblaje y transporte de las plataformas flotantes necesarias para la instalación de aerogeneradores en alta mar. Además, la inversión en infraestructuras portuarias adaptadas a las necesidades de la eólica marina no solo fortalecerá su competitividad a nivel europeo, sino que también impulsará el desarrollo económico de las comunidades locales costeras.

Por otro lado, los astilleros gallegos, históricamente reconocidos por su excelencia y capacidad de innovación, tienen una oportunidad única para seguir diversificando su actividad y convertirse en referencia en el nuevo paradigma de la economía azul. La construcción de plataformas flotantes de parques eólicos puede consolidar a Galicia como un referente internacional en tecnología eólica marina. Este desarrollo permitirá reactivar y modernizar un sector clave para la economía, garantizando empleo de calidad y fomentando la transferencia de conocimiento y tecnología.

Por supuesto, el desarrollo de esta tecnología debe hacerse en colaboración con sectores tradicionales como la pesca y el turismo. La convivencia entre la eólica marina y la pesca ya se ha demostrado viable en otros mercados más avanzados. Experiencias internacionales han demostrado que los parques eólicos coexisten con caladeros, e incluso mejoran la biodiversidad marina al actuar como áreas protegidas que favorecen la regeneración de especies. Es fundamental un diálogo constante con el sector pesquero, que garantice la compatibilidad de actividades y la convivencia de ambas actividades.

Por otro lado, el turismo, también puede beneficiarse de la implantación de la eólica marina. Los parques eólicos flotantes tienen un impacto visual reducido y pueden convertirse en ejemplos que refuercen la imagen de Galicia como destino comprometido con la transición energética. Ya hay ejemplos en otros países europeos en los que la imagen eólica suma valor a la marca país como reclamo hacia un turismo de calidad. Incluso en España, en Canarias, grupos hoteleros han sabido ver este valor añadido para su sello de excelencia turística.

Galicia tiene ante sí una oportunidad histórica. La eólica marina es una herramienta para revitalizar la economía, modernizar las infraestructuras portuarias y navales, y posicionarnos como líderes en sostenibilidad.

Retrasar el desarrollo de la eólica flotante trae consigo perjuicios que no podemos permitirnos: la no creación de nuevos empleos y la no generación de progreso sostenible para nuestras comunidades locales. Apostar por un desarrollo ordenado y respetuoso con nuestros sectores tradicionales no es solo una opción, sino una responsabilidad hacia las futuras generaciones.