La caída al Miño de un tráiler con 21 toneladas de congelados obligó a proteger las aguas

La Voz

OURENSE

23 sep 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

La caída a las aguas del río Miño de un camión cargado con 21 toneladas de pescado congelado provocó un importante despliegue técnico y humano durante el día de ayer.

Desde primera hora de la mañana, técnicos de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil acudieron a la zona, en la que el día anterior se había producido un grave accidente de circulación fruto del cual se produjo la caída del tráiler, el kilómetro 556 de la N-120 en Nogueira de Ramuín, para comprobar los efectos y desplegar barreras al objeto de evitar daños ambientales. Una de ellas estaba destinada a la absorción de combustible que pudiera verterse del depósito del camión, cargado con 800 litros. Pese a la precaución, los técnicos no detectaron vertido alguno con ese origen.

La segunda medida preventiva consistió en una barrera destinada a contener plásticos o cajas que pudieran caer del tráiler. Se constató que varias habían caído al río por lo que buena parte de la tarde se dedicó a recogerlas, desde lanchas zódiac.

También a media mañana, sobre las once, comenzaron las labores de izado del camión. Los agentes de la Guardia Civil de Tráfico tuvieron que cortar un carril de la carretera para que una grúa de grandes dimensiones pudiera trabajar en la recogida, que se hizo por partes y se prolongó hasta bien entrada la tarde.