El delantero del Arenteiro encara la fase final de su recuperación
10 ago 2019 . Actualizado a las 15:42 h.David Mitogo, el delantero del Arenteiro que se lesionó a finales del año pasado con rotura del ligamento cruzado de la rodilla derecha, ya ve la luz del final de su recuperación. Esta semana pasada se cumplieron seis meses desde que fue operado, el 5 de febrero, y desde entonces el jugador tuvo que someterse a un largo trabajo para recuperarse. Ahora se encuentra haciendo trabajo específico y en un mes confía en estar disponible para competir.
«Obviamente es una lesión grave. En muchos casos, los jugadores no recuperan su nivel anterior. Mi ventaja es que ya viví la experiencia hace nueve años con el cruzado de la rodilla izquierda. Esta vez me di cuenta en el momento, notas que se te va la rodilla. Fueron seis o siete meses duros, hay que ser constante. La exigencia física es importante. La vez anterior volví mejor. Mentalmente también estaba concienciado de qu iba a estar bien», relata el ariete. Aquella primera lesión se produjo cuando era jugador de la Ponferradina, en Segunda B. Después de recuperarse, recuerda que jugó treinta partidos en el Teruel, de la misma categoría de bronce, sin resentirse.
«Lo más difícil del trabajo ya está hecho», asegura Mitogo. El jugador ya está tocando balón, algo «más de lo que debería. Me piden que tenga paciencia», confiesa.
«Me hubiera gustado empezar desde el partido 1»
Aunque reside en Ponferrada, toda la recuperación la ha realizado Mitogo en O Carballiño, donde tiene el «apoyo de los compañeros y del club», que le ha facilitado el contar con un gimnasio con piscina, según cuenta el jugador. Además, en O Carballiño está el fisioterapeuta que le está tratando, Julián.
«Me hubiera gustado empezar desde el partido uno, pero estaré para dar mi granito de arena al Arenteiro», prevé Mitogo, que se mantiene unido al grupo y acude con el equipo a los amistosos de la pretemporada.
Las sensaciones, ya conocidas por su experiencia anterior, son buenas y aunque tenga que ser con la liga ya iniciada, el ecuatoguineano espera ayudar pronto. Será su segunda temporada consecutiva en el club verde. Anteriormente perteneció al Centro de Deportes Barco -en dos etapas-, al Compostela, al Atlético Bembibre, a la SD Ponferradina -club en el que estuvo como juvenil- y al mencionado Teruel de la Segunda B.