El grupo ourensano Tandub presenta su primer trabajo, «Wahid», y justo acaba de tocar en el Náutico de San Vicente
15 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Todo surgió de una jam session en el Café Cultural Auriense, uno de esos encuentros de músicos en los que se ponen a improvisar y a tocar en conjunto, sin ensayo previo, dejándose llevar y fusionando su forma de interpretar cada instrumento. Así es como el bajista ourensano Toño Pérez conoció a Abdul el Gourd. «Apareceu cun instrumento tradicional marroquí, unha guitarra hajouj que nos hipnotizou a todos», recuerda. De la evolución de ese encuentro, sumado a un viaje a Marruecos hace diez años, surge el grupo Tandub, que completan el guitarrista Román Puga, el percusionista Carlos Puntxa Rivera, el batería Kinhos Saburido; y la nueva incorporación, el vocalista y también pintor Antón P. Couto, que además de cantar, pintará cuadros en directo durante los conciertos. «A intención inicial era mesturar a música marroquí coa tradicional galega xa que hai un patrón que coincide coas muiñeiras e flipounos», recuerda Toño. Sin dejar de divertirse, comenzaron a tomárselo en serio hace dos años, presentando sus temas a concursos. Ahora mismo son finalistas del certamen coruñés Fran Pérez Narf, junto a bandas como Peña, Sleepy Spice, Elba y Secho. Pero es que además acaban de ganar otro, el promovido por los Estudios Mans. El premio fue tocar en el Náutico de San Vicente, en O Grove, uno de los lugares emblema de la música en directo del verano gallego. Su concierto fue el domingo, con el atardecer de fondo sobre el mar. «É o templo musical do verán e foi unha oportunidade impresionante. Desfrutámolo moitísimo», admite Toño.
Tandub suena a folk, a fusión de Galicia con Marruecos y a buen rollo. Letras en árabe, salpicadas de gallego y de inglés, con bases que nacen de una muiñeira o de una cantiga, o directamente de la música gnawa. «É música para pasalo ben, para bailar e sentir a festa», afirma Toño. Ahora acaba de ver la luz su primer trabajo discográfico, un EP con tres temas originales y una versión de una canción tradicional gnawa. Se llama Wahid y puede disfrutarse ya en plataformas como Spotify o Youtube. ¿Serás capaz de no ponerte a bailar al escucharlo?