El paciente covid hospitalizado en Ourense: mayor de 80 y con otras patologías

María Cobas Vázquez
maría cobas OURENSE / LA VOZ

OURENSE

María Bustillo, Ricardo Fernández, Genoveva Novoa y Raquel Fernández, del servicio de Medicina Interna del CHUO, en el inicio de la jornada sobre enfermedades infecciosas
María Bustillo, Ricardo Fernández, Genoveva Novoa y Raquel Fernández, del servicio de Medicina Interna del CHUO, en el inicio de la jornada sobre enfermedades infecciosas MIGUEL VILLAR

En la mayoría de los casos, la infección se detecta en el propio centro médico

22 jun 2022 . Actualizado a las 12:59 h.

Estamos en una sexta ola iniciada en Navidad que no termina de finalizar y que están registrando picos de casos o quizás ya se podría hablar de una séptima, toda vez que hay un repunte en las cifras de contagio. Ambas definiciones las dio María Bustillo, la jefa del servicio de Medicina Interna del CHUO desde hace apenas un par de semanas (y que ha estado en la primera línea tratando a los pacientes covid desde el inicio de la pandemia) en la jornada de actualización de enfermedades infecciosas que se celebró ayer en el hospital. Bustillo no se decantó por una definición en su charla, en la que hizo un repaso de las diferentes olas y cómo afectaron al hospital, para después centrarse en la situación actual.

Ahondó la internista en que los contagios están subiendo, y recordó además que lo hacen en un contexto en el que solo se contabilizan los positivos de mayores de 60 años. Trazó el perfil de los pacientes ingresados en planta covid. El último balance oficial señala que hay 69 personas en hospitalización convencional (67 en el CHUO, una en el comarcal de Verín y una en el de Valdeorras) y una en uci. «La mayoría con covid incidental», dijo Bustillo, que explicó que son pacientes que ingresan por otra patología diferente al coronavirus y una vez en el hospital, descubren que también son portadores del virus. «Son personas con más de 80 años y con factores de riesgo», ahondaba Bustillo. Gente vulnerable que puede ver agravadas sus dolencias de base por la infección. Por eso Bustillo apeló a que hay que cuidar a este grupo de población, y más en una provincia como Ourense «con una población muy envejecida». Y añadió: «Esta zoonosis ha venido para quedarse».

Bustillo no solo pidió cuidar de los mayores, sino también de los pacientes con covid persistente. «Hay que darles cobertura», reclamó. Afecta fundamentalmente a mujeres jóvenes sin patologías previas que pasaron la infección en su casa sin demasiados síntomas pero que meses después arrastran cansancio, dolor torácico, trastornos neurológicos con pérdidas de memoria, falta de sueño o cefaleas. Pacientes cuyas pruebas no muestran anomalías, por lo que se trata de un diagnóstico que llega por descarte de otras patologías. «Es un problema grande y un gran desafío» para los médicos, dijo. Y las instituciones tienen que estar a la altura, insistió.

De la mortífera a la joven, los nombres de las diferentes olas

En su intervención, Bustillo hizo un repaso de las diferentes olas del coronavirus, recordando aquel 8 de marzo del 2020 en que se detectó el primer caso de covid en Ourense (en un momento en el que las pruebas positivas se enviaban a Madrid para su confirmación) y que dio paso a lo que llamó la ola mortífera. Y eso que, reconoció, «probablemente la cifra de infectados y de muertos sea mucho mayor» porque no había suficientes pruebas diagnosticas. Recordó que llegó a haber seis plantas del CHUO destinadas a pacientes covid, con más de 170 ingresados y otros 29 en la uci. Supuso cambiar todo el diseño del hospital. Aquel mismo verano comenzó la segunda ola y después, con la vacunación empezada y frente a lo esperado, en enero del 2021 llegó la tercera; que fue la segunda más mortal. La cuarta se dio en llamar la «olita, con una incidencia muy baja»; y el verano pasado se produjo la quinta, «la ola joven», que se inició con los botellones y los viajes de fin de curso. «Con un montón de positivos, pero un descenso importante de la mortalidad», dijo Bustillo. Unos rasgos que comparte con la sexta, marcada por la irrupción de ómicron y ahora con sus diferentes linajes.

La campaña de vacunación continúa en el CHUO (imagen) y en los hospitales comarcales de Verín y Valdeorras
La campaña de vacunación continúa en el CHUO (imagen) y en los hospitales comarcales de Verín y Valdeorras MIGUEL VILLAR

Ourense, Allariz, O Carballiño y Avión concentran uno de cada dos positivos

La curva sube de nuevo tras la tregua del lunes, y lo hace para marcar el segundo balance más alto de casos activos desde que comenzó el mes de junio. Hay 1.353 pacientes covid en la provincia tras detectarse 146 nuevos positivos (en un total de 604 pruebas diagnósticas) y registrarse 133 altas. Además, las cifras oficiales del Sergas recogen un nuevo fallecimiento de un paciente con coronavirus. Se trata de una mujer de 88 años, que eleva a 604 las víctimas de la pandemia en el área sanitaria de Ourense, Verín y Valdeorras.

Mirando al detalle del mapa, suben el número de concellos que están libres de casos. Ya hay siete sin ningún vecino infectado y, por contra, cuatro concentran uno de cada dos casos activos. Son Ourense, con 522 infectados, Allariz, con 58, O Carballiño con 45 y Avión con 44. Por debajo de las cuatro decenas destaca Melón, con 39 pacientes covid. En Barbadás y Xinzo de Limia hay 35, 28 en Celanova y O Barco de Valdeorras, 24 en Verín, 23 en Ribadavia, 21 en A Pobra de Trives, 18 en Cartelle y 16 en Bande. En el resto de concellos de la provincia hay menos de 15 casos activos.

La vacunación mantiene el ritmo

El CHUO y los hospitales comarcales de Valdeorras y Verín siguen con la campaña de vacunación, a la que la semana pasada se sumaron 35 niños que acaban de cumplir 5 años y 3 adultos. Además, otras 768 personas recibieron la tercera dosis.