Entre los meses de enero y junio se denunciaron dos asaltos contra el patrimonio cada día
15 oct 2023 . Actualizado a las 05:00 h.La seguridad ciudadana es una de las principales preocupaciones de las autoridades y por los resultados que este capítulo registra en la provincia de Ourense todo indica que de momento las alertas siguen activadas. Y es que las infracciones penales que se han contabilizado en los últimos meses ponen sobre la mesa un incremento de la delincuencia que, sobre todo, viene lastrada por el repunte de los asaltos contra la propiedad privada.
Así lo indican los datos facilitados por el Ministerio del Interior en su último balance y relativos a la situación vivida en las comisarías de Policía y cuarteles de la Guardia Civil de los municipios de la provincia. La estadística, que recoge cifras de delitos constatados entre los meses de enero y junio de este año, refleja que en ese tiempo se contabilizaron 4.803 infracciones, lo que supone un repunte respecto a la situación que se vivía hace un año. Entonces habían sido 4.764 las denuncias registradas, y aunque la subida es del 0,8 %, indica que la delincuencia no está en retroceso.
Eso sí, hay algunos tipos de violencia que están dando un respiro en los últimos tiempos y son, precisamente, los más graves. Así, en lo que va de año no se ha registrado en la provincia ningún delito de sangre grave, lo que sin duda es buena noticia. Ni homicidios ni asesinatos durante seis meses, un tiempo en el que también han bajado de forma muy notable los casos en los que alguien ha intentado arrebatar la vida de otra persona, sin éxito. Así, frente a los seis casos de este tipo denunciados entre enero y junio del año pasado, en los dos primeros trimestres del 2023 solo se han denunciado dos incidentes, lo que supone una reducción del 33 %.
En lo relativo a los delitos contra la libertad sexual, que durante los últimos años habían repuntado, la situación se muestra ahora más tranquila. Se han realizado 51 denuncias por actos de esta índole, las mismas que hace un año, pero hay un dato positivo, resultado de que se han reducido los casos más graves, es decir, las agresiones sexuales con penetración. Casi se han reducido a la mitad.
Sin embargo, la violencia en la calle sigue siendo un quebradero de cabeza para las autoridades. Los delitos de riña tumultuaria, resultado de incidentes entre personas, casi siempre en la vía pública y durante las noches de los fines de semana, siguen subiendo. Hasta el 30 de junio se habían denunciado 72 denuncias en toda la provincia, de las que 27 habían ocurrido en la capital de la provincia. Este tipo de trifulcas, que suelen terminar con personas heridas, repuntaron tras el fin de las restricciones provocadas por el covid-19 y de momento siguen subiendo. Este año el porcentaje es del 33 % respecto al anterior.
Tampoco hay mucho que celebrar si se analiza lo que ocurre con los delitos contra la propiedad. El balance de criminalidad del Gobierno desvela que en los seis primeros meses de este 2023 se ha tenido conocimiento por parte de las fuerzas de seguridad de 341 robos o hurtos. Medio centenar se corresponden con asaltos a personas, generalmente en la vía pública, con el objetivo de quitarles algo de valor usando la fuerza. Dinero, joyas o móviles suele ser el botín que buscan quienes cometen este tipo de actos, que ya suben un 6 %.
Los 291 delitos restantes son resultado de asaltos registrados en viviendas, bares o establecimientos públicos. Este año se han registrado una media de dos denuncias al día por estas situaciones y parece especialmente preocupante el incremento del 34 % en los casos de ladrones que acceden a viviendas particulares para robar. Ya son 182 las denuncias que se investigan.
En seis meses se han denunciado casi 1.100 delitos informáticos, pero caen las estafas
Las estadísticas evidencian que la criminalidad tiene ahora varios escenarios. Al tradicional, el de la calle, los domicilios o los establecimientos públicos, se ha sumado en los últimos años otro que resulta mucho más complicado de investigar. Los actos ilegales que se comenten a través de internet, con un ordenador o un móvil como instrumento para delinquir, son un auténtico quebradero de cabeza para las autoridades, si bien en el último balance oficial hay capítulos que están empezando a dar un respiro. Se trata de las estafas. El descenso en el primer semestre se situó en un 30 %, con 931 denuncias frente a las 1.335 de hace un año. Comprar o vender algo a través de internet supone un riesgo, así como facilitar ciertos datos bancarios a la ligera, pero los usuarios cada vez están mejor informados para detectar este tipo de conductas ilegales, y esto parece estar empezando a dar resultados. Con todo, el resto de ciberdelitos sigue creciendo en la provincia, con 165 casos.
Los delitos viales
Se mantienen en niveles estables tanto los robos de coches como el tráfico de drogas, si bien hay preocupación por la subida de delitos viales. Conductores que no tienen permiso o que circulan borrachos son denunciados a diario en la provincia.